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Salamanca es una de las provincias españolas que más visitantes atrae a lo largo del año. Esto se debe, fundamentalmente, a la historia, la cultura, el patrimonio y las tradiciones que aglutinan cada una de las calles de la capital y muchos de sus pueblos, pero también a los numerosos secretos que esconde, que solo unos pocos conocen y que bien merecen una visita.

Una de las grandes joyas de la provincia charra es el mágico entorno natural de la Sierra de Francia, uno de sus destinos turísticos por excelencia que destaca por sus campos verdes y majestuosas montañas que se entrelazan con preciosos pueblos que no pasan inadvertidos para el visitante, regalando impresionantes paisajes como el que puede apreciarse desde el Parque Natural Las Batuecas o en la Reserva de la Biosfera.

Uno de los bellos pueblos que se levantan sobre esta sierra es San Martín del Castañar, el cual ha sido catalogado como "una de las villas más auténticas de la comarca" por la prestigiosa revista de viajes National Geographic.

Ubicado sobre una atalaya que asoma al río Francia, levantado sobre restos de poblados romanos y rodeado de bosques centenarios, el histórico municipio es concebido como un destino perfecto para cualquier época del año, incluido el verano, dado que cuenta con una piscina natural de agua cristalina, perfecta para refrescarse y paliar las altas temperaturas que suelen acompañar a la temporada estival.

Formada por el arroyo de Canderuelo, se ubica en una zona de baño situada a un lado del puente y la calzada romana, en el parque municipal, donde, además, se puede encontrar una fabulosa zona de recreo, un bar-chiringuito acondicionado en los antiguos lavaderos de la localidad y hasta vestuarios.

Una de las plazas de San Martín del Castañar (Salamanca) Turismo Castilla y León

Si bien, esto no es todo lo que ofrece el municipio. Su núcleo urbano, declarado Conjunto Histórico-Artístico, del que destacan sus calles empedradas llenas de historia y sus pintorescas casas de piedra blasonadas, con tejados artesonados y preciosos balcones engalanados con flores, alberga un rico patrimonio visible en su Plaza Mayor, donde se encuentra el Ayuntamiento y el portalón que permitía al consejo disfrutar de los actos y festejos que se realizaban en el corazón del pueblo.

Este también se puede apreciar a través de la Plaza de la Iglesia de San Martín de Tours, construida entre los siglos XIII y XV y declarada Bien de Interés Cultural, donde varios estilos arquitectónicos como el gótico, el barroco y el jónico se fusionan creando una estampa incomparable.

Tampoco pasa desapercibido el Castillo de La Biosfera, del siglo XV y del que aún se conserva la torre del homenaje, el arco de la entrada y la muralla medieval, que hoy funciona como museo y sede del Centro de Interpretación y Recepción de Visitantes de la Reserva de la Biosfera de las Sierras de Béjar y Francia.

La plaza de toros, la segunda más antigua de España, ubicada a los pies del castillo; las ermitas del Socorro y el Humilladero, el área recreativa de La Legoriza y la zona de la Reverencia, antiguamente destinada al hospital, son otros de los tantos puntos de interés del municipio.

Piscina natural de San Martín del Castañar Ayuntamiento de San Martín del Castañar

Y es que, aunque todos y cada uno de ellos reúnen los suficientes encantos como para conquistar al visitante, no hay quien no quede impresionado con la Ruta del Bosque de los Espejos, un sendero circular de 9,2 kilómetros que recorre el parque natural entre las localidades de San Martín del Castañar, Las Casas del Conde y Sesqueros, que regala un fascinante paseo repleto de valiosas obras de arte.

'La torre de intercambio', de Jesús Palmero; 'La Casa del árbol' y 'Una aguja', de Luque López; o 'Efímeras magentas', de José Antonio Juárez son algunas de ellas.

Sin lugar a dudas, un compendio de joyas arquitectónicas, naturales y culturales que convierten a San Martín del Castañar en uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Salamanca y también en un destino de visita obligada.