La industria comienza a resentirse también en Castilla y León arrastrada por la presión ejercida por los altos costes de la electricidad y la pérdida de competitividad.

La empresa Cerealto Siro Foods, multinacional del sector de la alimentación con cuatro plantas en la región, ubicadas en Toro, Aguilar de Campoo y las otras dos en Venta de Baños, ha comunicado a los representantes sindicales su intención de negociar un Plan de Mejora de la Competitividad

La empresa, que da trabajo a 1.400 empleados en la región, dibuja en su Plan Estratégico cerrar próximamente un acuerdo con un socio inversor, para dar respuesta al crecimiento de sus clientes y avanzar en su expansión.

Esta inversión exige movimientos enfocados a mejorar la competitividad de la empresa, en un escenario complicado tras la crisis provocada por la irrupción de la pandemia, a la que se suma la incertidumbre que planea sobre el futuro a corto y medio plazo por el incremento de costes producidos por la escalada de los precios de la electricidad.

Este movimiento obedece a la necesidad de preservar la capacidad de la compañía para mantener el empleo y seguir generando riqueza en los territorios donde se asienta.

Desde 2010, los costes laborales de las plantas de Cerealto Siro se han disparado un 33%, muy por encima de la evolución del IPC que en estos once años ha subido un 13%.

Estos ratios generan una desventaja competitiva frente al mercado que la multinacional quiere corregir para seguir creciendo, a través de una mesa de diálogo con los comités de empresa.

Los sindicatos se niegan a dialogar

La propuesta de Cerealto Siro de intentar encauzar esta situación, ha sido rechazada de pleno por la representación sindical de esta multinacional, que anuncia movilizaciones si se pretende ganar en competitividad por esta vía.

Tras la reunión que mantuvieron ayer, UGT considera que el origen de este plan de mejora planteado por la empresa no responde a problemas de viabilidad sino a "la mala gestión por parte de la empresa", según indica a este periódico Mónica de la Sierra, secretaria general de la sección sindical estatal de Cerealto Siro.

Los sindicatos temen que la empresa quiera unificar los diferentes convenios colectivos a los que se acogen los empleados de la firma, y apuntan a la "bajada del porcentaje que vende la empresa a Mercadona, que ha pasado del 80% al 60%", como uno de los motivos por los que Cerealto Siro busca hacer números, afirma De la Sierra.

"Creemos que la empresa busca acabar con los derechos y mejoras que hemos ido adquiriendo en estos últimos 25 años, por lo que rechazamos de plano la creación de un único convenio para todas las plantas", añade.

De la Sierra ha indicado a EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León que aún desconocen qué medidas quiere plantear la empresa, pero que todos los comités rechazan por unanimidad sentarse a negociar nada que suponga una rebaja de las condiciones de los trabajadores.