La actual edición de MasterChef Celebrity nos ha dejado numerosos descubrimientos televisivos. Nos ha enseñado la faceta más disciplinada de Nicolás Coronado y Gozalo Miró, ha ratificado que Josie es lo máximo (Valverde), nos ha demostrado que a sus 71 años Celia Villalobos todavía puede enfrentarse a nuevos retos, y también nos ha enseñado el lado más humano y divertido de Ainhoa Arteta.

Como espectador, la soprano me ha despertado una gran fascinación desde el primer minuto; uno tiende a pensar en las cantantes de óperas como en divas inaccesibles, pero Arteta ha demostrado que es muy competitiva, pero también muy divertida y desenfadada, y también humilde.

Lo mismo emula a Montserrat Caballé cantando ‘Barcelona’ junto a Jordi Cruz como Freddy Mercury que le planta un beso en los morros al juez. O se enfada, con el programa y consigo misma, por no haber hecho un trabajo a la altura.

Muchos recordarán cómo Arteta se derrumbó en el cuarto programa, cuando el jurado le llamó la atención por derrochar unos filetes para hacer un caldo. Entre lágrimas, la artista se defendió. “No soy una derrochona, nunca lo he sido. No se me ha ocurrido otra manera de hacer un caldo. Da igual”, decía. “En Estados Unidos vivía con un dolar al día, cuando estaba sola he comido hasta latas porque no tenía ni hornillo para calentar” añadía, demostrando que tiene los pies en la tierra y que no olvida sus orígenes.

¿Y si Arteta fuese a Eurovisión?

Por estas y otras razones, me pregunto hasta qué punto podría resultar interesante contar con Ainhoa Arteta para otro concurso televisivo como es el Festival de Eurovisión, quizá para 2022. Entre otras cosas, porque la propia Arteta ya ha dicho que es seguidora del mismo.

En su participación en Samanta y la vida de...., la soprano narró a Samanta Villar que para ella Eurovisión era uno de los días más especiales del año, que solía conocer las canciones participantes de antemano y ademá se conoce todas las canciones españolas y hasta podía contar anécdotas sobre las mismas.

Dos canciones líricas se han colado en el top 10 de Eurovisión en los últimos años

Además, de cara la promoción, Ainhoa cuenta con una gran baza, que es sus conocimientos idiomáticos. La soprano sabe hablar, leer y escribir en castellano, euskera, inglés, francés e italiano, y sabe cantar en ocho idiomas. Algo que daría mucho juego, por ejemplo, para hacer versiones de la canción elegida en otras lenguas, algo que antaño se hacía mucho y que con el tiempo se ha ido perdiendo.

En los últimos años, varias propuestas líricas se han colado en el top 10 en la final de Eurovisión; la estonia Elina Nechayeva quedó octava en en 2018 con La forza, un tema que muchos recordarán por su puesta en escena con un gran traje que cambiaba de color. Y sin olvidarnos de Kate Miller-Heidke, la cantante australiana que quedó novena en 2019 con Zero Gravity, otra canción que también tiró la casa por la ventana con su escenografía, con la cantante y sus coristas haciendo piruetas en el aire como si volasen.

Por otro lado, la participación de Ainhoa Arteta dignificaría el Festival de Eurovisión en España, en la misma línea que lo hizo la participación de Pastora Soler. Ayudaría a que otros artistas viesen que Eurovisión no es algo para principiantes, sino un proyecto que puede ser muy interesante para la vida profesional de cualquier cantante, independientemente del estilo musical o la carrera que tengan. Y de paso, callaría a esos cantantes que, sin haber ido a Eurovisión, se les llena la boca cargando contra el mismo tachándolo de friki o coñazo. 

Su proyecto frustrado: ‘Mask Singer’

Además de como concursante de MasterChef, Ainhoa Arteta ha estado ligada en los últimos años a varios programas de televisión. Por ejemplo, fue jurado de Prodigios, en Televisión Española también. Y además, si no llega a ser por la crisis sanitaria del coronavirus, habría formado parte del equipo de investigadores de Mask Singer: adivina quién canta.

Recordemos que el programa de Antena 3 se iba a lanzar la pasada primavera como la gran apuesta de entretenimiento de la cadena justo al finalizar Tu cara me suena. Arteta iba a estar junto a Los Javis y José Mota, pero debido a que las grabaciones se pospusieron al final su lugar lo ocupó Malú, que al parecer era la primera opción.