Al rojo vivo cumple este miércoles 2.000 programas convertido en referencia informativa y en un pilar fundamental de laSexta. Sin embargo, lo curioso es que este debate político no nació en laSexta, ni se emitía en las mañanas, ni iba a ser presentado por Antonio García Ferreras.

Al rojo vivo nacía en enero de 2011 en el late night de laSexta 2, de 23:30 a 1:40 horas con el objetivo de plantar cara a los debates de derechas en TDT. “Va a ser el único debate de no derechas (…) No va a ser la típica tertulia, tendrá más modernidad, será más americana”, explicaba el consejero delegado de la cadena, José Miguel Contreras, durante la presentación del Balance 2010 y las Novedades para 2011 de laSexta.

Contreras comentaba que, de momento, la cadena estaba barajando el nombre de dos periodistas de peso, “uno de la casa y otro de fuera”, para presentar la tertulia política, aunque “en ningún caso se trata de Iñaki Gabilondo”. El nombre de fuera era Juan Ramón Lucas y el de la casa Antonio García Ferreras.

La apuesta por Al rojo vivo estaba enmarcada dentro de los nuevos objetivos que tenía la cadena para sus dos nuevos canales de TDT, laSexta2 y laSexta3, con los que esperaba llegar en cada caso a más del 1%, lo que se traduciría en un 9% para el grupo completo.

Su estreno, precisamente, estuvo cerca de ese 1% ya que el espacio atrajo el interés de un 0,9% de la audiencia y 90.000 espectadores. El programa contó con con la presencia de los periodistas Francisco Marhuenda (La Razón), José María Calleja (Onda Cero), Fernando Berlín (Radiocable.com), Elisa Beni y Federico Quevedo (El Confidencial) y el político Antonio M. Carmona.

"Buenas noches y bienvenidos a Al rojo vivo. Queremos que este sea un programa plural, que apueste por la pasión política y donde esté presente el pensamiento crítico. No seremos equidistantes, pero sí seremos honestos en nuestros planteamientos", dijo Ferreras en el estreno.

Su salto a las mañanas de laSexta no se produciría hasta septiembre de ese mismo año. Y de un 5,2% de cuota con la que cerró su primer año en la cadena grande, el programa de Ferreras dobló su resultado en apenas dos años.