Horripilantes recetas, documentales escalofriantes, reformas espantosas, series aterradoras, películas terroríficas y músicas espeluznantes. Alaska ha sido la primera 'Selekcionadora' o personalidad elegida por la cadena SELEKT para diseñar toda la parrilla de programación a lo largo del día de Halloween.

La artista ha seleccionado una programación perfecta para el 31 de octubre, ofreciendo desde especiales infantiles como Las historias espeluznantes de Masha hasta películas clásicas del terror como Hellraiser, Tesis o Creepshow 2, pasando por documentales sorprendentes como Extrañas criaturas y programas de estilo de vida como el Especial Dulces de Halloween de Alma Obregón.

¿Te has sentido dueña y señora del canal?

Es un regalo en cualquier circunstancia, y ya ni te digo en Halloween. Pero lo podría hacer cualquier día del año con cualquier excusa. A cualquiera que nos gusta la televisión, el que te den carta blanca es el mejor regalo. 

Como amante de Halloween, ¿habías echado de menos que un canal tuviera una programación específica?

Ahora no es como antes que solo estaban los canales oficiales. Ahora tenemos muchas plataformas. Las programaciones eran más encorsetadas y ahora hay más libertad para hacer inventos como este, que son divertidos y apetecibles.

Echo en falta la época dorada de José Manuel Parada en 'Cine de barrio' cuando el programa duraba una hora, se merendaba, había invitados y estaba Pablo Sebastian de pianista

¿Cómo seleccionaste los contenidos?

Esto es como cuando eres comisario de una exposición. Lo tuve que elegir entre los contenidos posibles. Tuve un menú que ya existía. No es como ponerme a inventar. 

Como amante del cine, ¿te has planteado presentar un programa de terror?

Lo hemos planteado muchas veces. Fue muy proyecto. Lo hablamos con Chicho, que en España es nuestra Elvira. Una vez dijo de hacer algo, pero no pasó nada. Es tan obvio que no se le ocurre a nadie por obvio. Siempre digo que podríamos hacer la cara B de Cine de Barrio y que sea Cine de Madrugada. Podría cubrir los dos espectros perfectamente. 

¿Qué pasó con el musical de la 'Bola de Cristal' que quería hacer Pablo Carbonell? ¿Participarías?

Fue Pablo el que lo planteó. Hace ya mucho tiempo, pero no tengo ni idea. Yo siempre pienso que lo que hice ya lo hice. No creo que haya volver sobre los mismos pasos.

Acabas de cumplir un año al frente de Cine de Barrio, ¿qué valoración haces?

Otro regalo porque era un programa que veneraba, que disfrutaba. Hablar de esas películas que te gustan, que te divierten, y que han sido y que son parte de tu cultura y tu educación sentimental es un disfrute total. Yo echo en falta la época dorada de José Manuel Parada cuando el programa duraba una hora, se merendaba, había invitados y estaba Pablo Sebastian de pianista. Ahora no deja de ser una mini cápsula y donde apenas puedes presentar la película. Como fan recuerdo maravillada aquella etapa de las meriendas. Pero me conformo con lo que tengo y muy contenta. Han pasado 25 años. Cuando comenzó Cine de Barrio se ponía cine de 25 años atrás. Y ahora lo lógico es que pongamos cine de 25 años. Además de los clásicos, ponemos cine de los 80 o 90 con un contexto familiar. Un programa que dura tanto tiempo tiene que evolucionar, sin olvidar nuestros clásicos.

Alaska.

Ahora que vuelve el Benidorm Fest, ¿te atreverías a presentarlo?

¡Por qué no! ¡Y en Benidorm! Es que son como las cosas que más me gustan del mundo. Fangoria tiene mucha relación con Benidorm: le dedicamos un documental, hacemos conciertos especiales, el disco que sale en marzo tiene que ver con Benidorm... Es otro formato en el que me siento muy cómoda. Ya presenté las galas de preselección y me lo pasé bomba. Fue el año que Melody estuvo a punto, pero fue Soraya. Fue divertidísimo.

¿Y presentarte como candidata?

Eso siempre lo contestamos de la misma forma. Para ir a un concurso tienes que ser más expresivo. No servimos para eso. Somos cero competitivos. Nos daría igual que nos dieran 0 que 12. Hay que ir con otro espíritu. No servimos para eso. Hay que saber las limitaciones de cada uno.

No servimos para Eurovisión. Somos cero competitivos. Hay que saber las limitaciones de cada uno.

¿Y como artistas invitados?

Con la escasez de galas musicales que tenemos en las televisiones, desde luego.

¿Volverá en algún momento 'Alaska y Mario'?

Sabéis que es un formato que empezó de forma casual y de repente fueron cinco temporadas. Y lo mismo que nunca estuvo planteado, no está planteado ni hacerlo ni no hacerlo. Lo que pasa es que la televisión va muy rápido. Hace ya diez años del reality y ha cambiado todo mucho. No sé si tendría sentido. De momento no hay ninguna previsión.

¿Hay algo a lo que Alaska le tenga miedo?

A todo. Por eso disfruto tanto del terror. Vengo de ser jurado en el Festival de Sitges y he dormido sola trece días. Tengo miedo a todo: a lo físico, a lo humano y a lo sobrenatural. 

¿Y si tuvieras que elegir un miedo o una fobia?

Fobia a los pájaros. De pequeña le tenía miedo a lo que no se ve, pero ahora le tengo miedo a lo que también se ve. Me asusta igual el fantasma que el asesino en serie. 

¿Qué ha supuesto para ti la televisión en tu carrera? ¿Qué te queda por hacer?

Esa especie de Cine de Barrio, pero de terror. Es el sueño de toda persona que le gusta presentar programas y además el género. La televisión ha sido fundamental. Soy de esa generación en la que a los profesionales no les gustaba la televisión. Mi gran sorpresa fue que la gente que hacía la televisión, menos Chicho, era gente que estaba de rebote porque no podía hacer cine o publicar sus novelas. Y no consideraban el miedo como tal. Eso ha cambiado mucho y la gente que se dedica a la televisión lo hace porque le gusta. En el año 82, cuando empecé a ser tertuliana en La clave, descubrí un medio que me encanta y en el que me siento muy cómoda. Soy muy feliz haciendo televisión.