Opinión

Método ibérico para salvar Europa

.

.

Nuestra tierra se muere de sed. Nuestros campos se venden improductivos. Nuestros pueblos aprenden el lenguaje del silencio. Nuestro sol sólo modula la piel, no nuestra energía. Nuestro gobierno, como todos los gobiernos populistas, se ofrece a salvar el mundo.

Vamos camino de ser absorbidos por humanoides de todo tipo de origen… Vamos permitiendo el deterioro de nuestras costumbres… Vamos enmudeciendo la lengua de nuestros padres y antepasados… Vamos convirtiendo la convivencia en mercadillos de feria…

Faltan “Hombres de Estado”… Faltan políticos formados, no “uniformados”… Faltan ideólogos, eruditos independientes con género apolítico… Falta honradez política, al permitir el sonrojo de la vergüenza de las víctimas y la desvergüenza de los indultos a medida… Faltan respuestas… sobran mentiras y promesas incumplidas.

La carreta populista recorre ciudades y pueblos repartiendo “prebendas” a toda organización civil o religiosa que respete y defienda las formas de gobernar, “París bien vale una Misa”.

El “fiel” de las Escrituras intenta cruzar el desierto de la soledad, sin pastores, sin profetas… simplemente con la “fe”, que está demostrando ser un “don”, gracias al cual podemos soportar tanta falsedad clerical y pseudo religiosa.

Reunido el “Pueblo de Dios” para diseñar el futuro, sus componentes se olvidan que los lugares de culto siguen cerrados en nombre de una “pandemia utilizada”… Se olvidan que no han enseñado al pueblo sencillo a “orar telemáticamente”… Se olvidan que su Jesús lo que más rechazaba era la hipocresía… Se olvidan que la juventud necesita descubrir la verdad mediante el ejemplo sincero de sus predicadores.

Hoy, ahora, con el sofocante politiqueo interior, el “Mayor de la pandilla” quiere exponer ante Europa que España está abierta a hablar, a cooperar, a dirigir, a…
¡Siempre mintiendo! ¡Si no somos capaces de hablar entre nosostros!

A todo esto algunos lo llaman “progresismo”, otros, “estancamiento” y el pueblo llano suele reconocerlo como el “sistema ibérico para vivir unos pocos” (teléfonos de contacto: página Web de todos los Partidos, Asociaciones y Fundaciones).

No he querido ofender, sino, más bien, abrir un debate.