Opinión

Tertulianos

Pablo Iglesias, durante el debate organizado por la Cadena Ser.

Pablo Iglesias, durante el debate organizado por la Cadena Ser. Ser

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Desde antes de la dimisión de Pablo Iglesias, se decía en los medios de comunicación, incluso como dando alguna primicia importante, que al retirarse de la política iba a fichar por alguna empresa de comunicación para dirigir o participar en un programa de la misma. Parece ser que, efectivamente, finalizada su etapa activa en la política Pablo Iglesias ha fichado como tertuliano (una de las “profesiones” de moda y en la cual hay muchos ignorantes, pero populares personajes de la España actual) en la cadena SER y en la catalana RAC1 y ha decidido irse a vivir a Barcelona. Otro dato más, negativo para la decadente Cataluña y positivo para la imparable Madrid de Díaz Ayuso y el resto de España. Muchas gracias por el detalle.

Yo creía que Pablo Iglesias al retirarse de la política española, iluso de mí, iba a irse a vivir a alguno de sus paraísos comunistas, Cuba, Venezuela, Nicaragua o Bolivia (no creo que aguantase más de algunos meses o incluso 1 año en ninguno de estos países, que conozco bien, sobre todo Cuba y Venezuela), pero ya veo que ha decidido, como buen comunista, seguir el camino de los capitalistas, ganando mucho más dinero que de político. ¿A quién intentas convencer con tus soflamas comunistas?

Toda esta cadena de acontecimientos me parece correcta, pero a mí me sigue asaltando la misma duda que tenía desde el principio: ¿A quién le va a interesar hoy día, después de ver lo que ha hecho en el gobierno y en su vida privada, lo que diga el comunista y personaje Pablo Iglesias? A mí desde luego, nada en absoluto. Y lo que es peor todavía: ¿por qué le interesan?, a quien le interese, las opiniones de este señor que ha demostrado, en el efímero periodo de tiempo como político los siguientes aspectos negativos:

a) Una inmadurez como vicepresidente del gobierno y ministro de asuntos sociales, dedicando más tiempo a ver series en la TV que a sus labores y agenda de político.

b) Una falsedad como político, ya que como buen comunista ha cumplido con la máxima de todos los regímenes comunistas: “acabaremos con la pobreza”, pero naturalmente con “su pobreza” (no la del pueblo que le vota), pasando a vivir del barrio obrero de Vallecas al lujo de su chalet en una zona residencial de Madrid (previa la patética consulta a las bases de Podemos).

c) Una irresponsabilidad absoluta por las muertes de los más de 6.000 ancianos en las residencias de mayores de Madrid y las más de 60.000 de toda España, que está por ver en las querellas que ya tiene presentadas y en las próximas, si cometió negligencia en su cargo.

d) Una cobardía total y muy propia de regímenes comunistas como ocurrió en el caso de Chernóbil en 1986, donde los dirigentes comunistas abandonaron a su pueblo y sobre todo a sus valientes soldados “liquidadores”. ¿Dónde estuvo el político comunista del gobierno Pablo Iglesias durante los días más duros del confinamiento por la pandemia del coronavirus? ¿Visitó alguna de las residencias de ancianos a su cargo?

e) Un olvido absoluto como fundador del partido Podemos y luego Unidas Podemos embaucando en primer lugar a sus 4 compañeros fundadores que poco a poco fueron abandonando el partido y también a 5 millones de españoles indignados. El gobierno de un país como España no tiene nada que ver con una asamblea de la facultad de Ciencias Políticas de la Complutense de Madrid y los ilusos fundadores de Podemos, confundieron ambos conceptos.

Por lo tanto, repito mi pregunta: ¿A quién le puede interesar lo que diga Pablo Iglesias?

Recientemente acabo de leer que el exministro José Luis Ábalos, maestro de primaria como título universitario y uno de los personajes más “oscuros y controvertidos” del PSOE y gobierno socialcomunista, ha sido fichado por un canal de TV privada, para un programa llamado Todo es mentira. Haría la misma pregunta que sobre Pablo Iglesias, pero creo que no merece la pena. Creo que, en ambos casos, se retrata perfectamente a la audiencia de dichos programas radiofónicos y televisivos, que lógicamente respeto, pero que en absoluto comparto. Mi admirado Leonard Cohen decía que “a veces uno sabe de qué lado estar, simplemente viendo quiénes están del otro lado”.

Como decía acertada e inteligentemente, mi antepasado el torero Guerrita, uno de los 5 califas del toreo cordobés y uno de los personajes más vivos de su época: “En esta vida hay gente pa tó (por cierto gracias a la democracia y no al comunismo, ¿verdad?).