Son diez años sin la banda terrorista ETA, porque ETA no existe, está disuelta por mucho que algunos intenten resucitar el dolor y el sufrimiento para beneficio propio.
El cocidito madrileño se esfuerza por mantener vivo al monstruo.
Se debe hacer un esfuerzo para normalizar a EH Bildu en las instituciones, como método para ganar en las urnas a los independentistas y a todo aquel que piensa que ETA estuvo bien, cuando en realidad fue un horror que ha dejado terribles consecuencias.
La única forma de vencer el terror es abrir la ventana para que entre la luz que ilumine a las personas libres, capaces de tomar decisiones conscientes y consecuentes basadas en el conocimiento y la responsabilidad de las acciones.
Cuando consigamos ser una sociedad libre y avanzada, los partidos dictatoriales, no tendrán cabida en nuestra sociedad.