REFLEXIONES

Justicia penal internacional

Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

  1. Opinión

Hasta el más bruto hace panes en el tiempo y en las sociedades actuales. Los modernos medios de comunicación propician que aunque no nos interesen los asuntos sepamos de ellos y la naturaleza humana determina que a partir de ahí formemos criterio y tomemos partido. Es cierto que la superabundancia de información hace que los acontecimientos envejezcan a velocidad vertiginosa, pero algo queda.
En mi registro algo quedó de la ahora casi olvidada Justicia penal internacional. Se topó con las normas internas de los países concernidos y, sobre todo, con sus propias contradicciones. Sea por esto solo o con otros aditamentos, lo cierto es que no vive sus mejores momentos.

Y no será por falta de materia a la que hincar el diente en tiempo real: Cuba, Venezuela, Ucrania, Iraq, Turquía y, sobre todo, Siria que se muestra como la quintaesencia de la mezquindad y la contradicción en las relaciones y los conflictos extra-ultranacionales.
Pero sospecho que va a ser que no, que ningún espíritu sensible se acordará hoy a los efectos a los que me remito de Al-Assad, de Putin, de Erdogan, de Obama. Puede que dentro de un par de décadas. Pero para entonces tendríamos otros machos-alfa cuyo encausamiento penal internacional se diferiría otro par de décadas.
Siempre ha sido así, el bucle alimenta al bucle.