El tiempo que hará durante la Semana Santa es un tema que preocupa a todos los españoles. Unos por su participación en las procesiones, y otros porque buscan aprovechar los días festivos para hacer una escapada.
¿Dónde hará buen tiempo en Semana Santa? La Aemet habla de inestabilidad y probabilidad de lluvia en amplias zonas del país; sin embargo, en este pequeño pueblo aragonés las previsiones son de cielos despejados y temperaturas moderadas.
Hablamos de Valderrobres, un pueblo medieval muy cerca de Zaragoza, en el que durante la Semana Santa se espera buen tiempo. El municipio está considerado uno de los más bonitos de España, y además su celebración religiosa está declarada de Interés turístico de Aragón.
Valderrobles.
La Semana Santa de Valderrobres, declarada Fiesta de Interés Turístico de Aragón, comienza el Miércoles Santo, con la Procesión del Vía Crucis, que consta de catorce estaciones y recorre el casco antiguo de la localidad.
La Procesión del Silencio sale el Jueves Santo. Recorre el casco antiguo para llevar los pasos hasta la Capilla de las Hermanas, donde descansarán hasta la procesión del día siguiente.
Semana Santa de Valderrobres. Imagen de archivo.
El Viernes Santo, que este año será el 18 de abril, se celebran dos actos muy importantes:
- La Rompida de la Hora, a las doce de la mañana en la Plaza de España, dónde todos los tambores tocan al unísono, conmemorando así la muerte de Jesús en la cruz y cómo la tierra tembló.
- La Procesión del Santo Entierro, encabezada por la Cruz Procesial y seguida por los pasos: la Oración del Huerto de los Olivos, el Cristo Crucificado, la Soledad de la Virgen y el Santo Sepulcro.
Qué ver en Valderrobres
Valderrobres es la capital de la Comarca del Matarraña, en Teruel. Desde Zaragoza se tardan unas dos horas en coche, por lo que, para aprovechar el viaje, merece la pena pasar la noche allí en algunos de sus hostales.
En el siglo XII, Valderrobres formaba parte de la Peña de Aznar Lagaya, territorios reconquistados en 1169 y donados en 1175 por el rey al obispado de Zaragoza, que casi inmediatamente los cedió a Fortún Roberto. En el año 1183 es cuando se le concede a este territorio su carta de población.
Valderrobres está construido sobre una pequeña montaña, lo que hace que tenga unas largas escalinatas, cuya pendiente llama la atención de cualquiera. Para adentrarse en sus pequeñas calles y pasadizos, cruzamos primero un imponente puente de piedra. Este fue concebido como un elemento fundamental para dar acceso al recinto amurallado de la ciudad y salvar el obstáculo que supone el caudal del Matarraña.