Alrededor de un terreno de 80 hectáreas junto al campus Río Ebro de Zaragoza se construirá uno de los grandes proyectos públicos de esta legislatura en Aragón. El Gobierno autonómico va a invertir “no menos” de 100 millones de euros en la creación de un gran parque tecnológico que aúne todo un ecosistema de innovación, investigación y desarrollo en nuevas tecnologías, al albur de los grandes proyectos que van a aterrizar en la Comunidad de la mano de compañías como Amazon, Microsoft o Blackstone.

Conocido como el Distrito Aragonés de Tecnología (DAT) César Alierta, este espacio agrupará a empresas, universidades e investigación como el eje central del sueño de Aragón de convertirse en un gran hub tecnológico del sur de Europa. Con ello, Aragón y Zaragoza esperan atraer a empresas y desarrolladores de múltiples ámbitos relacionados con la tecnología, centrándose en asuntos de ciberseguridad o inteligencia artificial.

De estas 80 hectáreas, alrededor de 16 se destinarán a la creación de parcelas para la ubicación de proyectos empresariales, junto a otras 15 para usos docentes e investigación universitaria, creando, asimismo, un gran espacio verde. Se ubicará prácticamente a los pies de la A-2, que conecta Madrid y Barcelona, y la entrada a Zaragoza por la A-23, que llega hasta la frontera con Francia.

No obstante, todavía habrá que esperar para que el DAT Alierta se convierta en una realidad. El Ejecutivo autonómico ha presentado este lunes los primeros trazos del Plan Director, que estará finalizado en febrero. IDOM, misma empresa que ha diseñado, entre otras cuestiones, La Nueva Romareda, es la encargada de llevar a cabo el proyecto y de definir cómo quedará este nuevo espacio tecnológico en la capital aragonesa.

Un edificio central como corazón del DAT Alierta

El corazón de este DAT Alierta será el edificio central, la principal sede e imagen del parque, que se integrará en el centro de la urbanización como un “vórtice” que “articule tanto a los edificios que nos van a rodear como todo el espacio público”, como ha explicado Toño Fernández, director de proyectos de gran escala IDOM.

En este edificio central se albergarán, igualmente, una serie de usos comunes, como un auditorio para 500 personas, la zona de restauración, oficinas del parque, guarderías, gimnasio o zonas de formación. “La sede en el centro, más que como edificio, se perfila como un espacio de encuentro y de relación, que va a conectar todo el espacio público de lo que es el parque”, ha señalado el director de Proyectos de IDOM, Eduardo Aragüés.

Edificios dinamizadores y zonas verdes

Alrededor de esta sede central se ubicarán cinco edificios dinamizadores y flexibles que darán, además, una “imagen unificada” hacia el exterior. En ellos, si bien queda por definirlo en el diseño final, podrían acogerse usos como una residencia de estudiantes, viviendas de alquiler, oficinas, aparcamientos verticales y hasta un hotel. “No sería residencial privado, porque no es posible, pero sí plantear viviendas de cohousing o coliving”, ha reseñado Aragüés.

Junto a estos edificios dinamizadores se creará una red de espacios secundarios, paseos, plazas y bulevares para conectar todo el parque entre sí. También se han diseñado hasta cuatro bosques lineales, aprovechando la acequia de Juslibol que transcurre por la parcela y que se definirá como el “corazón verde” del DAT. Igualmente, se utilizará el desnivel para colocar bancales que permitirán integrarse en el conjunto del parque y que conducirán hacia el edificio central.

Casi 160.000 metros cuadrados para empresas

No será menor el espacio que se reserva para empresas. Los diseñadores de este Distrito han fijado una decena de parcelas para la construcción de las sedes de las compañías que aquí quieran instalarse, de diferentes tamaños, teniendo en cuenta, además, que podrán dividirse para albergar varios proyectos.

“¿Viene una empresa para 15.000 metros? Pues ocupa toda la parcela. ¿Vienen cuatro de 3.000? Se podrá fragmentar esa parcela en parcelas más pequeñas. Se dio esta estrategia para tener la mayor flexibilidad y poder sacar al mercado estas parcelas”, ha explicado Aragüés.

En total, de los 800.000 metros cuadrados (80 hectáreas) que contará el DAT, se destinarán 158.000 a “uso mixto”, es decir, sedes de empresas, uso terciario, oficinas o laboratorios.

Hay que tener en cuenta que, de la 80 hectáreas, unas 30 ya están construidas con espacios de la Universidad de Zaragoza, el CEEI o el Instituto Tecnológico de Aragón. A ellos, se sumarán otros 40.000 metros cuadrados de uso docente (hasta un total de 144.000) y 26.000 de investigación institucional (total de 95.800).