Su nombre reivindica la cocina local y con ella se convierte en uno de los quince restaurantes más buscados de España. Clave en el éxito de este restaurante de Alicante es que mantienen un menú al mediodía de 15 euros. Como presumen, los clientes son "familia".
Este es el currículum que atesora La Marmita Alicantina, el local que regenta Fernando Sepulcre en el centro de la ciudad. Y con una amplia sonrisa celebra que la plataforma TheFork lo haya escogido en la lista Top 100 de 2024 en el puesto número 11 de España.
Este reconocimiento nacional, impulsado por más de un millar de valoraciones de los comensales, celebra la defensa a ultranza de la gastronomía local. Por eso presumen de tener una nota de 9,7.
"Te sientes muy satisfecho", valora sentado en el pequeño comedor de su local. Y recalca que "ha merecido la pena todo ese esfuerzo" del equipo que gestiona un espacio con capacidad de 44 personas, aunque limitan el aforo a 35 para garantizar la calidad del servicio.
Los usuarios premian ese apartado con una nota de 9,9 en esta plataforma y Sepulcre valora que "ese reconocimiento lo hacen los comensales, no lo hacemos nosotros ni TheFork incluso".
Para Fernando Sepulcre, La Marmita es, ante todo, "un espacio alicantino donde intentamos conservar la gastronomía local y sacar pecho de todos los productos de nuestra provincia, tanto de comida como de bebida".
Defensa de lo alicantino
Así lo refleja desde la carta de vinos, que asegura es un 90 % de Alicante, hasta los productos autóctonos que reivindican: "Aquí no tenemos orujos ni aguardientes, aquí tenemos herbero y misteletas de Xaló, turrón, brevas, granada, tenemos arroz nuestro".
Esta defensa de lo propio fue tan crucial que, de hecho, cuando reabrieron en 2019, le añadieron el apellido "alicantina" al nombre por "esa defensa de lo nuestro, de todos los productos".
Uno de los pilares del éxito de La Marmita son sus arroces. Su especialidad más solicitada en pescados es el arroz de atún y cebolla: "El arroz de pobres era arròs amb ceba y entonces llegaron nuestros pescadores y dijeron, '¿Y si le ponemos un poco de atún?' Pues es un arroz de los más exquisitos que tenemos".
Estos arroces son melosos y se elaboran "en caldero, como los hacen en Tabarca". De las seis opciones que incluyen en carta se encarga su maestro arrocero Daniel Torá.
Fernando también destaca el de pollo y conejo. Aunque a veces se considere "un poco vulgar", asegura que "precisamente es uno de los mejores arroces que tenemos en esta tierra. De hecho, el nuestro va acompañado con su ramita de tomillo y su ramita de romero".
En los entrantes, proponen platos como los boquerones al cabasset (por enrollarlos en una masa muy fina y que acompañan de mermelada de tomate) o la ensalada de capellà (la bacaladilla seca) con las mollitas de la tradicional coca alicantina, para ofrecer "todo el sabor local en un plato".
El coulant de turrón con helado de horchata que preparan en La marmita alicantina.
La identidad alicantina la imponen incluso en los postres. Su estrella es el coulant de turrón de Jijona que combinan con helado de horchata. Este helado, asegura Fernando, se lo preparan en La Ibense desde su apertura a petición suya porque "helado como tal no existía" en la provincia. Otro "escándalo" en la mesa es la torrija de vino con helado de fondillón.
Guías turísticos
La experiencia en La Marmita Alicantina va más allá de la comida. Sepulcre reitera en que no tienen clientes ni comensales, sino "familia de la casa". Y por eso, con numerosos clientes procedentes del extranjero, se ofrecen como particulares guías turísticos para recomendar visitas en Alicante.
"No solo les atendemos con todo el cariño del mundo para aconsejarles que prueben las cosas locales, sino que además les hacemos un poco de guías turísticos", asegura. De hecho, llega a decir que si el visitante pasa el fin de semana, incluso les preparan un plan completo.
Fernando valora una visita de un influente polaco que tras comer en su local lo recomendó en redes y a partir de ahí "empezaron a venir muchos polacos", por lo que tuvo que traducir su carta a este idioma. Y en los países del Este, la República Checa también grabó un programa sobre la cocina tradicional alicantina en este local.
Otro idioma que ha tenido que incluir en su carta es el italiano. De hecho, asegura, están "invadiendo" el restaurante. Y pone de ejemplo que incluso les llaman directamente desde el aeropuerto para reservar una mesa para despedidas de soltera.
