Alicante

Un chalet abandonado, convertido en una lucrativa plantación de marihuana. Ese fue el plan por el que están acusados dos hombres que fueron detenidos por este motivo. Así ha intervenido la Guardia Civil de Alicante las casi quinientas plantas que estaban cultivando gracias a un enganche ilegal a la red eléctrica.

La investigación se inició este agosto, cuando la Guardia Civil recibió información que indicaba la posible existencia de una plantación de marihuana en el término municipal de Aspe. Tras un exhaustivo análisis, los agentes del puesto principal en esta localidad del Medio Vinalopó iniciaron la operación Borisa Indoor.

En la primera fase de la operación, los agentes lograron identificar una vivienda aislada en Aspe, presuntamente destinada al cultivo de marihuana. Tras intensas gestiones, descubrieron que la propiedad pertenecía a un ciudadano británico fallecido en 2022, aparentemente sin ningún familiar interesado en ella.

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La vivienda estaba siendo utilizada sin contrato de alquiler ni compra, y en esta etapa, los agentes contaron con el apoyo de la Unidad de Medios Aéreos de la Policía Local de Elche. En una segunda fase, con la colaboración de una empresa energética, se detectó un enganche ilegal en la red eléctrica que abastecía la vivienda investigada, causando un perjuicio económico estimado en 34.000 euros.

Una vez que se pudo acreditar que en el interior de la vivienda había la plantación de marihuana, el 30 de octubre, se realizó un registro. En ella los agentes detuvieron a la persona encargada de la guarda, custodia y mantenimiento de la plantación: un hombre español de 54 años de edad. Así, intervinieron 495 plantas de marihuana y material utilizado en su cultivo, incluyendo sistemas de ventilación y riego.

Al día siguiente, en la puerta de los Juzgados de Novelda, se detuvo a otro individuo identificado como el responsable de la plantación. Se trataba de un hombre de nacionalidad española de 28 años que tenían antecedentes por delitos contra la salud pública.

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Los detenidos se enfrentan a cargos por delitos contra la salud pública por el cultivo de marihuana y defraudación de fluido eléctrico. Puestos a disposición del Juzgado de Guardia de Novelda, ambos fueron puestos en libertad con medidas cautelares.

El comunicado de la Guardia Civil concluye recordando que estas operaciones se producen dentro del que valoran como exitoso marco de la operación Miller. Esta línea de ámbito nacional se enmarca en el Plan de Respuesta Policial al Cultivo y Tráfico Ilegal de Marihuana, gracias al cual se contribuye a evitar la distribución de esta sustancia hacia países de Europa central.