Tres atracos en menos de una hora en dos localidades diferentes del centro de la provincia de Alicante. Este es el cargo bajo el que han arrestado este miércoles a un joven de 21 años, justo cuando supuestamente iba a robar una furgoneta a la salida de un supermercado en el que acababa de robar en Novelda.

Una llamada de alerta al 112 ha activado el protocolo de actuación a primera hora del día. Según explica el comunicado de la Guardia Civil, un testigo alertaba a las ocho de la mañana de que un hombre había acabado de robar en una estación de servicio en la avenida de Navarra de Aspe. Y tras cometer el delito había huido en un turismo con dirección a la vecina Novelda.

Tras recibir el aviso, la Guardia Civil de Alicante y la Policía Local de Novelda comenzaron a batir los alrededores para tratar de localizar al sospechoso. Y rápidamente llegó otro aviso de atraco precisamente desde esta última localidad. De nuevo en una estación de servicio, la situada en la avenida Reyes Católicos de Novelda. La descripción aportada por los testigos correspondía al presunto autor del primer aviso.

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Las patrullas de la Guardia Civil y de la Policía Local se distribuyeron por las inmediaciones de los lugares en los que los testigos informaban haberlo visto por última vez. Así localizaron al presunto autor en el barrio María Auxiliadora de la localidad de Novelda, el más cercano a Aspe.

En ese tiempo había tenido tiempo de realizar el tercer robo con violencia e intimidación por el que está acusado. Esta vez en un supermercado cercano. Y allí los agentes de la Policía Local le sorprendieron cuando se disponía a robar una furgoneta propiedad del establecimiento, probablemente con intención de huir con ella.

Así, los efectivos policiales le pidieron que depusiera su actitud y se entregara, cosa que no hizo. Según indica el comunicado, el joven arrestado se había resistido activamente a la detención. Hasta tal punto que los agentes de Policía Local han usado una pistola eléctrica oficial hasta conseguir reducirle y proceder a su arresto.

La Guardia Civil ha intervenido el arma, una pistola de aire comprimido cuyas partes se encontraban desmontadas. La investigación estima que el joven mostraba solo el cañón mientras apuntaba a sus víctimas para que creyeran que portaba un arma de fuego.

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Ha sido trasladado por la Guardia Civil al Hospital de Elda donde le han atendido por las lesiones sufridas con ocasión de la detención, que a priori no revisten gravedad, según el comunicado. El Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Novelda, que instruye las diligencias, ha iniciado la investigación para esclarecer los detalles. Tan pronto como el detenido sea dado de alta médica y se realicen las primeras diligencias, será puesto a disposición del Juzgado de Guardia de Novelda.