El aviso rojo de la dana Alice sorprende a los turistas que llegan a la provincia de Alicante. Pese a ello, solo la suspensión de eventos como el festival Rocanrola y el desvío de algunos vuelos afectan a la llegada de más visitantes, según APHA.
Luis Castillo, presidente de la Asociación Provincial de Hoteles y Alojamientos Turísticos de Alicante, explica que el anuncio del aviso rojo este jueves no está teniendo un impacto tan alto como se podría imaginar inicialmente. En un puente con elevada ocupación, el freno estima que llega al 5 %.
Esa es la ventaja de trabajar con un alto índice de extranjeros, razona Castillo para EL ESPAÑOL: "El extranjero tiene su billete sacado y salvo que le cancelen el vuelo, no deja de venir. Otra ventaja también son las estancias largas, cada vez son más largas y hay algunos clientes que ya están aquí".
Hay otra razón clave por la que las cancelaciones del mercado extranjero son "poquísimas". Como apunta, el presidente de APHA este tipo de visitantes tiene un alto índice de pago de tarifa no reembolsable.
Los motivos fundamentales de las anulaciones que están gestionando desde este jueves en los establecimientos tienen que ver más con los vuelos cancelados o desviados a Málaga. Estos desvíos sí están afectando, incluso a grupos de 25 personas, indica Castillo.
El mercado nacional, a diferencia del foráneo, acostumbra a dejar la elección de destino a última hora. Este sí que está más pendiente de las condiciones meteorológicas y de los avisos que lanza la Agencia Estatal de Meteorología.
Uno de los peores golpes, concede, es la suspensión del festival Rocanrola. Los tres días de conciertos de rap y hip hop son una de las grandes citas musicales del género en España y atraen a numeroso público, con una media de veinte mil asistentes por jornada.
Castillo matiza sobre esa tendencia general que la situación es más compleja en los hoteles y apartamentos del interior de la provincia. "Acabo de hablar con un hotel y todo está cancelado debido a la gente afectada por la situación", apunta, "el interior va a sufrir un poquito más las cancelaciones".
Con unas lluvias que han sido menores de lo esperado durante el jueves y la mañana del viernes que se suman a una previsión que refleja una mejoría, Castillo insiste en que el balance no será catastrófico.
Los cálculos que manejan desde APHA señalan que el impacto final afectará como máximo a entre un 3 y un 5% del total del conjunto de reservas. Una cifra que incluso creen que podría ser menor si deja de llover durante el viernes.
A eso se aferra el presidente, quien destaca que las lluvias en la ciudad de Alicante han estado muy concentradas lo que ha permitido que la actividad se vaya animando a lo largo del día. Tras una mañana que parecía "un desierto" y le recordaba al parón de la covid, el movimiento aumenta.
