El HLA Alicante ha vivido en las últimas horas uno de esos movimientos de mercado que alteran el equilibrio interno de un equipo y obligan a reaccionar con rapidez.
La inesperada salida este martes de Jordan Walker, uno de los jugadores más determinantes de la plantilla, ha provocado un reajuste inmediato en el perímetro del conjunto alicantino, que ha encontrado respuesta en el fichaje del dominicano Eddy Polanco, un perfil contrastado en la Primera FEB y con amplio conocimiento de la categoría.
Walker ha decidido emprender un nuevo reto profesional tras abonar su cláusula de salida, una circunstancia que cogió por sorpresa tanto al club como al entorno del equipo. Su marcha se produce, además, en un momento especialmente significativo, apenas unos días después de firmar una actuación sobresaliente ante el Cartagena, encuentro en el que fue elegido MVP y volvió a demostrar su capacidad para asumir galones en los momentos decisivos.
No todo han sido, sin embargo, aspectos negativos en la salida del escolta estadounidense. El abono de la cláusula de rescisión ha supuesto una inyección económica relevante para las arcas del club, una circunstancia especialmente valorada en una categoría exigente desde el punto de vista presupuestario como la Primera FEB...
Desde su llegada a Alicante, Walker se convirtió en una de las referencias ofensivas del equipo. Su talento individual, su facilidad para anotar desde diferentes registros y su personalidad competitiva le permitieron marcar diferencias en numerosos partidos y convertirse en uno de los nombres propios del curso.
No es casualidad que el club, en el comunicado oficial de despedida, haya subrayado su “compromiso, profesionalismo y talento excepcional”, además de destacar la “huella imborrable” que deja tanto en el vestuario como en la afición.
La comisión deportiva del Lucentum reaccionó con rapidez para cubrir una baja tan sensible. El elegido ha sido Eddy Polanco, alero dominicano con amplia experiencia en la Primera FEB y un viejo conocido de Rubén Perelló. Ambos coincidieron en Almansa, una circunstancia que ha facilitado la operación y que puede resultar clave para acelerar la adaptación del jugador al sistema y a las exigencias del equipo.
Polanco tiene mucho ganado de antemano, ya que Sus números en la categoría hablan por sí solos: más de 14 puntos de media por partido, porcentajes de tiro superiores al 47 % y una aportación constante en el rebote, con más de tres capturas por encuentro.
Pero más allá de las estadísticas, el dominicano ofrece un perfil distinto al de Walker, menos centrado en la explosividad individual y más orientado al equilibrio colectivo, a la lectura del juego y a la consistencia en ambos lados de la pista.
Desde el club se insiste en que Polanco aportará experiencia, talento y polivalencia, además de una capacidad contrastada para generar juego y adaptarse a diferentes roles dentro del perímetro.
El calendario no concede margen. El próximo compromiso del HLA Alicante llegará el 4 de enero en Mahón, donde se medirá al Menorca, y la previsión es que Eddy Polanco ya esté disponible para entrar en la convocatoria y comenzar a sumar desde el primer instante. Un escenario exigente para un debut que servirá como primera prueba de fuego en este intercambio de cromos.
Con 13 jornadas disputadas, el HLA Alicante ocupa la tercera posición de la clasificación, a solo dos victorias del liderato, en poder del Leyma La Coruña, y mantiene intactas sus aspiraciones de colarse en las eliminatorias por el ascenso en una Primera FEB tan igualada como exigente.
El cambio en el perímetro obliga a reajustar roles y automatismos, pero no debería modificar la sinfonía coral del equipo. El Lucentum confía en que la llegada de Polanco, unida al refuerzo económico dejado por la salida de Walker, permita mantener el rumbo en una temporada que sigue ofreciendo motivos para la ilusión.
