Cuando Adriana Tonda tenía 12 años y se grababa cantando Let it go, el tema principal de Frozen, no imaginaba que llegaría el día en que lo podría cantar frente al director de una de las películas de animación de más éxito. Y ha sido posible este noviembre gracias al concierto en Los Ángeles que esta joven cantante de Alicante de 22 años ha hecho con el director de orquesta de Novelda Óscar Navarro.
El encuentro con Chris Buck es uno de los que no olvidará de este viaje a Estados Unidos, "fue de las cosas más top que pasaron". Este invitó a Adriana y a Óscar a cenar en su casa donde "nos estuvo contando cómo había trabajado en Disney toda su vida, que había estado en los estudios de Los Ángeles".
En ese momento íntimo con uno de los responsables de elegir los proyectos de animación de los estudios Disney, la joven tuvo la oportunidad de cantar el éxito de Robert López y Kristen Anderson y para demostrarle que ella era una gran seguidora le mostró su vídeo de preadolescente cantándolo. "En qué momento estoy cenando en casa de Chris Buck, el director de Frozen y Tarzán y le estoy cantando el Let it go. Fue increíble".
Y eso fue posible por la colaboración que mantiene con el también compositor noveldense. Con él ya había compartido nominación en unos premios musicales en Hollywood por la canción Abrazos para el cielo. Este concierto en el auditorio Lanterman con la Orquesta Sinfónica Juvenil de Pasadena, al que también fue Buck, les ha servido para "quitarnos un poco esa espinita de que no pudimos ir al año pasado" a los galardones.
Por todo ello Adriana siente que "el esfuerzo al final tiene su recompensa" y se siente muy emocionada por haber podido cruzar el Atlántico para actuar en una de las capitales de la industria musical del mundo. Un reto por el que admite haber ido "un poco nerviosa: lo tengo que hacer todo bien y centrarme y conocer a la máxima gente que pueda".
Esa autoexigencia que se había marcado contrasta con lo que se encontró allí: "Fue todo mucho más relajado, la gente además era simpática". Concluyó que "la presión es más lo que uno se pone antes de los nervios que lo que es una vez estás allí".
¿Cantar en inglés?
Tras este concierto en California, la cantante regresa a casa "muy inspirada de allí". El viaje le ha abierto nuevas posibilidades, en especial en relación con el idioma: "Me apetece mucho meterme también en eso y a lo mejor sacar una canción en inglés y poder moverme más por otros sitios".
Actualmente, Tonda mantiene un balance entre su faceta de música clásica y orquestal y su carrera pop, con la que antes de este viaje publicaba Tu versión de ayer: "Estoy con el corazón dividido". Por un lado le encanta el trabajo con orquestas y Óscar Navarro porque es "cuando más disfruto de cantar", pero también disfruta de la composición y el pop, por lo que está "fluyendo" entre ambas.
Mirando hacia el futuro, la artista tiene sueños ambiciosos, incluyendo el teatro musical, un género que estudió durante varios años en Madrid. Su mayor inspiración es la trayectoria de artistas como Ariana Grande, que combina la música discográfica con proyectos como bandas sonoras o musicales.
Finalmente, Adriana Tonda reveló un gran deseo profesional que le gustaría alcanzar: "Ir a Eurovisión también sería un sueño". Y para ello se plantea el pasar por el Benidorm Fest, con quien ha estado en contacto con el concursante José Otero, quien le ha dado consejos sobre lo duro y emocionante que resulta.
