Benidorm se convierte cada verano en un carrusel de maletas, chanclas y scooters eléctricas formado por decenas de miles de turistas. Este año, el comienzo de las vacaciones ha sorprendido a más de uno por las altas temperaturas.
Si alguien sabe de turismo en la ciudad es la creadora de contenido Michelle Baker, la persona tras la cuenta Benidormforever, es un auténtico faro para los británicos y turistas que llegan a la ciudad de los rascacielos.
La británica, que lleva cuatro décadas en España, asegura que este es uno de los veranos más calurosos que recuerda, motivo por el cual "aparentemente hay menos gente durante el día, porque están en la playa o en la piscina del hotel".
"Por mucho que puedan decir, yo llevo aquí 40 años y cada año hace más calor. Esto a los turistas británicos les choca", asegura.
El contraste térmico se hace evidente para los viajeros nada más poner un pie en la ciudad. Tanto es así que una turista le comentó a Baker que "no se podía creer" el calor que hacía al bajar del avión.
Muchos, precisamente, buscan este calor. Sin embargo, la creadora de contenido les advierte: "que tengan cuidado con lo que desean", porque pueden encontrarse con días de calor asfixiante como los que ha vivido la ciudad en los primeros compases del verano.
"De hecho, las tendencias ya están cambiando: la gente busca meses un poquito más frescos y viene a partir de octubre", añade. La ventaja, apunta, es que "Benidorm ya nunca cierra, está a tope todo el año".
Los bares se han convertido en refugios climáticos en las horas más calurosas. Pero es por la noche, cuando los neones y los leds sustituyen la luz del sol, cuando alcanzan su mayor afluencia.
"Por la noche los bares están a tope y las aceras están llenas desde que se pone el sol. Aunque hay muchos borrachos y problemas con los porteros de los locales en la calle Gerona", reconoce.
Así, la experta en turismo asegura que está habiendo un cambio de tendencia en la denominada zona guiri.
"La gente ya no quiere estar en esta parte de Benidorm porque puede ser problemática. Ya pasan página y se van más hacia el centro de la ciudad", concluye.