Tan solo 503 días ha durado la tranquilidad en la urbanización Residencial Cala Alta de Villajoyosa. Tras haber sido escenario del asesinato del piloto ruso Maxim Kuzminov en 2024, el hallazgo del cadáver de un hombre ucraniano en la piscina el pasado 29 de junio volvió a sacudir a sus vecinos.
Según ha podido saber EL ESPAÑOL, el fallecido de 61 años encontrado flotando en la piscina tras morir en extrañas circunstancias, era Ihor Hrushevskyi, un alto cargo del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado del Ministerio del Interior de Ucrania y, posteriormente, de la Policía Nacional ucraniana.
Pasadas las 21:30 del 29 de junio, Ihor se encontraba bañándose en la piscina comunitaria, a la que tenía acceso como nuevo propietario tras haber adquirido un piso en el bloque 1 hace unos meses que estaba reformando.
Poco después, una vecina ucraniana y unos jóvenes que pasaban por las zonas comunes lo encontraron boca abajo y sin pulso, en lo que parecía un ahogamiento.
Rápidamente lo sacaron del agua y le practicaron la reanimación cardiopulmonar, pero, al igual que los sanitarios desplazados al lugar, no pudieron salvarle la vida.
Las circunstancias de su muerte han despertado dudas entre los vecinos. Algunos piensan que pudo sufrir un ataque al corazón o un derrame cerebral, mientras que hay quienes temen que haya sido un nuevo crimen.
El ucraniano no presentaba signos de violencia, pero sangraba por uno de los oídos, motivo por el cual la hipótesis del derrame cerebral es la más apoyada por los residentes, que ven poco probable que se haya ahogado en una piscina que no supera 1,50 metros de profundidad.
Vista aérea de la urbanización Residencial Cala Alta de Villajoyosa.
La poca relación de Ihor con los demás reisdentes hizo que su pasado fuera desconocido para muchos. De los cerca de 20 vecinos consultados por este diario, tan solo uno sabía su nombre y que trabajaba en la lucha contra el crimen organizado.
De hecho, la mayoría ni siquiera sabían que en la piscina donde se refrescan había sido encontrado su cadáver tres semanas antes.
Lucha contra el crimen
La confidencialidad propia de una de las unidades de élite del Gobierno ucraniano convierte a Ihor en un fantasma, sin rastro en documentos oficiales o en informaciones públicas.
Es al bucear en sistemas de verificación de registros legales ucranianos cuando aparecen firmas que lo sitúan como jefe y persona autorizada del registro como entidad jurídica del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado del Ministerio del Interior de Ucrania en las regiones de Cherkasy y Kirovograd en 1993.
Este cuerpo fue disuelto oficialmente en 2015 como parte de una profunda reforma policial. En su lugar, se creó la actual Policía Nacional de Ucrania, con el objetivo de cortar con prácticas corruptas del pasado y acercarse a los estándares europeos.
Maxim Kuzminov, el piloto ruso que fue asesinado en Villajoyosa.
La unidad que ha asumido muchas de las funciones del antiguo UBOZ es la Dirección Principal de Lucha contra el Crimen Organizado y la Corrupción dentro del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU).
Esta unidad ha sido noticia esta misma semana después de que agentes del SBU mataran a efectivos del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) que habían asesinado a un coronel ucraniano.
Con todo, la edad de Ihor y la reciente adquisición del piso hacen pensar a algunos de sus vecinos que podría haberse jubilado para mudarse a esta zona de Villajoyosa, conocida por su gran comunidad de ciudadanos ucranianos y rusos.
Asesinato del desertor
Las sospechas de algunos vecinos de que Ihor haya sido víctima de un asesinato por parte de agentes rusos se deben principalmente a la coincidencia de que el suceso haya ocurrido exactamente donde el piloto ruso Maxim Kuzminov fue tiroteado el 13 de febrero de 2024.
De los más de 3.000 kilómetros que separan Alicante de Ucrania, el destino, en una suerte de lotería probabilística, situó a los dos fallecidos a unos metros de distancia: uno en el garaje y otro en la piscina.
La rampa del garaje donde fue encontrado el desertor ruso.
Esta coincidencia podría no ser casual, teniendo en cuenta que el presidente ruso, Vladímir Putin, tiene contactos y equipos de seguridad que conocen la zona a la perfección, ya que solía veranear en su refugio de lujo en Altea Hills, en el municipio de Altea, antes de la guerra.
La sombra del asesinato de Maxim aún pesa en la zona de la Cala Alta. Los vecinos aún recuerdan el miedo que experimentaron al conocer que el hombre ucraniano de 33 años asesinado era, en realidad, un desertor ruso de 28 años con identidad falsa.
Maxim traicionó a su país entregando al Ejército de Ucrania un sofisticado helicóptero de combate Mi‑8, que él mismo pilotó hasta una base militar de Járkov, a cambio de 500.000 euros.
Su intento de pasar desapercibido bajo identidad falsa en Alicante no funcionó y el Servicio de Espionaje Exterior de Rusia envió agentes para ejecutarlo cuando descubrieron la traición.
Este caso continúa abierto y está bajo secreto de sumario, siendo dirigido por el juzgado número 3 de Primera Instancia e Instrucción de La Vila Joiosa.