Alicante

Agentes de la Guardia Civil de Ourense han investigado a un hombre, de 27 años, vecino de Alicante, como presunto autor de un delito de estafa y otro de falsedad documental de material sanitario.

Según informó el Instituto Armado, la investigación se inició a raíz de una denuncia de una empresa de venta de material sanitario de Ourense. El representante manifestó que, tras enviar un pedido, el justificante bancario de supuestamente haber formalizado el pago por valor de 18.000 euros, no recibió el dinero ni la mercancía de vuelta.

Tras varias gestiones, la Guardia Civil constató que el documento bancario fue modificado, tanto el número de cuenta como de la entidad bancaria, dándole total apariencia de legalidad.

[El error de bizum de un invidente que acaba en denuncia para un bar de Petrer: 960 euros]

Violación en Castellón

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a seis años de prisión por un delito de agresión sexual y otro de lesiones a cada uno de los dos hombres que violaron a una mujer después de dejarla inconsciente de un golpe en la cabeza.

La Sala contempla para la víctima una indemnización de 16.064 euros por los daños morales que sufrió a consecuencia de la violación y por las lesiones que le ocasionaron los golpes que le dieron los condenados, según el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.

La sentencia, dictada después de que las acusaciones y las defensas llegaran a un acuerdo y presentaran una calificación conjunta de los hechos y las condenas a imponer, prohíbe a los dos hombres comunicarse con la perjudicada por cualquier medio y acercarse a su domicilio, su lugar de trabajo o estudio o cualquier otro espacio que frecuente la mujer durante los siguientes siete años al cumplimiento de las penas de prisión.

Los hechos ocurrieron en Castelló en la tarde del 24 de abril de 2021 cuando los condenados invitaron a casa de uno de ellos a la víctima, con la que habían estado tomando cervezas. Una vez en la vivienda, le golpearon en la cabeza y la dejaron inconsciente, la tumbaron en un sofá y la violaron.

Cuando la mujer recobró la consciencia, comenzó un forcejeo con los agresores, que la arrastraron por la casa y le dieron puñetazos y patadas para impedir que huyera.

La perjudicada consiguió coger un cuchillo con el que amenazó a los dos agresores y pudo así salir de la vivienda, pero ellos la volvieron a introducir a la fuerza en el interior del piso.

En un momento de la agresión, consiguió nuevamente zafarse de los hombres, salir a la escalera y recibir el auxilio de una vecina. La mujer sufrió diversas contusiones y hematomas en la cara, la espalda y los brazos.

La sentencia recoge que los condenados, en el momento de la comisión de los hechos, tenían "gravemente alterada las facultades psicológicas por el consumo de bebidas alcohólicas".