Alicante

Esta semana declaró a EL ESPAÑOL de De Alicante que quería acabar con la programación de ésta sede como una “casa de cultura de barrio”

Sólo planteo que se cumplan los fines de una institución de diplomacia pública. Nació para tener más permeabilidad y más flexibilidad de lo que puede tener una embajada bilateral. Esta corporación se encarga de la cuenca mediterránea y su misión es trasladar y potenciar todas las políticas del Estado en la cuenca y viceversa, de ésta en España. Y dentro de eso se hace un apéndice que es potenciar a Alicante internacionalmente.

¿Cómo se ha llegado a convertir la Casa en un mero programador cultural?

Porque no ha habido dirección general en los últimos 18 meses y porque hubo un momento con la crisis económica en que se pensó que la Casa había que cerrarla. No se cerró, pero se dejó disminuida al mínimo. Así que con lo que se dejó sólo se podía hacer lo que se estaba haciendo, pues eso, una casa de cultura del barrio. Tú no vienes a aquí a tener una terminal del Ministerio de exteriores en una capital de provincia para que compita con la Concejalía de Cultura. Esa no es nuestra misión.

¿Qué plantea para redirigir el proyecto?

Situarme en los fines y en los Estatutos. Reducir la programación diaria, que además no ha provocado una afección porque hay actos que han tenido alguna gente pero otros sólo tres personas. Así que no hemos hecho un trauma. Lo que hemos hecho es dirigir el gasto y el esfuerzo de personal a la coordinación internacional.

¿Cómo por ejemplo?

Vamos a representar al Estado español en una proyecto internacional de exploración subacuática que se llama “Banco de Skerki” que está delimitado entre Córcega, Sicilia y Túnez con una prospección de la UNESCO. Y de ella van a participar Italia, Francia, Túnez, España y Grecia. España tenía dificultades por parte del Ministerio de Cultura para ver cómo se hacía. Casa Mediterráneo con su vocación, va a asumirlo. Eso nos permitirá tener por primera vez una relación directa con la UNESCO y una alianza internacional en esta materia y de lo que resulte poder hacer una gran exposición. Empezará en septiembre.

El director en su despacho de la Casa. Iván Villarejo

¿Qué otros proyectos tiene?

A finales de mayo vamos a hacer un Foro Económico en Orán, que será un intercambio entre empresarios con la ciudad argelina en aquellas materias que los gobiernos decidan que son las estratégicas. Yo quiero, también, que la cumbre de la OTAN de Madrid tenga ramificaciones y que se trate el papel del flanco sur y del Sahel, y voy a proponer al ministerio que se haga una actividad de alto nivel aquí.

También ha hablado de un foro de universidades y de ciencia e innovación.

Si queremos sentar una conciencia y un discurso mediterráneo, se tiene que empezar a hablar de inteligencia y de una posible unión mediterránea de universidades. Y que las universidades de nuestro entorno sean el germen y la turbina que o impulse esa propuesta.

La presidencia francesa a la UE ha convocado una reunión de ministros de Cultura en Nápoles en junio. Nosotros queremos tener una de la cuenca, no sólo de Europa, para analizar las consecuencias de la pandemia en las industrias creativas y en la cultura en general y que soluciones se plantean.

Tenemos compromiso de hacer escaneado en toda la cuenca de la situación en la que se encuentra la tecnología en menores de 35 años. Un trabajo de análisis, de estudio de la realidad y exposición pública que nos dejaría documentación. Lo queremos hacer con el MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts). Así que el cambio es radical, de presentar un libro de cocina a colaborar con el MIT…

¿Se puede hacer todo eso con el presupuesto que tiene?

Se puede porque estamos ahorrando y haciendo “economías”, con contratos que no eran necesarios y que hemos anulado. Y estamos creando un Alto Patronato de empresas colaboradoras de la Casa. Esa es una de las tres cosas pendientes, junto con el Consejo Diplomático, con todos los diplomáticos acreditados en España de la zona mediterránea, y el Consejo Asesor.

¿Qué es el Alto patronato?

Queremos que esté en marcha antes de finales de año y eso nos va a suponer tener un porcentaje destacado de fondos para la Casa, con 300.000 euros más para desarrollar acciones. Es un cálculo que hemos hecho. Hay que destacar que todas las que he comentado antes ya tienen presupuesto.

"De una casa que tenía 23 trabajadores y casi 3 millones de presupuesto pasamos a una casa que se ha quedado con 4 personas más 4 dirigentes y 840.000 euros de presupuesto.

¿Es la Casa Mediterráneo el hermanito pobre de la red de casas de Exteriores?

En estos momentos la Casa Mediterráneo es de low cost, la más pobre de todas. Tiene 600.000 euros del Ministerio, 200.000 de la Generalitat y 40.000 de la Diputación. Los ayuntamientos de Benidorm y Alicante han tenido un descuido y llevan unos años sin pagar. Si pagan este año, también nos subirá el presupuesto. De una casa que tenía 23 trabajadores y casi 3 millones de presupuesto pasamos a una casa que se ha quedado con 4 personas más 4 dirigentes, más algunas asistencias técnicas, que funciona con 840.000 euros de presupuesto.

El presupuesto es muy importante, pero el presupuesto sin ideas no vale para nada. Nosotros estamos demostrando que tenemos proyectos e ideas y por eso vamos a exigir a los consorciados que, si es posible, dupliquen el presupuesto el año que viene.

En años anteriores se planteó la supresión de la Casa o incluso la creación de una Casa Europa que junto con la de África vaciarían de contenido la del Mediterráneo. Algo curioso, porque ya existe la UE y sus múltiples instituciones.

La UE está por concluir pero no por definir, mientras que la política para el Mediterráneo -y esto es un punto de vista muy particular-, está por definir. Es más cómodo mirar desde la UE con los ojos de las grandes potencias a los países del Este que mirar al Mediterráneo, porque genera conflictos.

Bueno, ahora el conflicto está en el Este, en Ucrania.

Ya, pero tú miras al Mediterráneo y tienes el Open Arms pidiendo puerto para los inmigrantes, movimientos migratorios más amplios, un estado fallido en Libia, una guerra en Siria… Son problemas que está ahí y hay que abordarlos. Cuando se dice una “Casa Europea” resulta que siempre tenemos tendencia plantear lo fácil, pero lo fácil ya está atendido. Tenemos que atender lo difícil, y para eso se nos elige o nombra en los cargos.

"No vamos a poder huir del mar que nos une ni vamos a poder cambiar de territorio. La Comunidad Internacional no puede mudarse, a partir de ahí tenemos que entendernos"

¿Puede entrar en el conflicto entre Argelia y Marruecos? Porque nos afecta.

Sí, es un problema de vecindad, pero también es un problema nuestro. Cuando consigamos mirarnos las dos orillas frente a frente y nos reconozcamos, algunas cosas serán más fáciles. No vamos a poder huir del mar que nos une ni vamos a poder cambiar de territorio. La Comunidad Internacional no puede mudarse, a partir de ahí tenemos que entendernos.

¿Está preocupado por el estado actual, inacabado, del edificio?

Se había concedido un 1,2 millones de euros del Fondo del 1% Cultural que se ha perdido porque no teníamos licencia de actividad. Hay un dinero en el presupuesto congelado para obras, que con eso no se acabarían. Pero es que no quiero terminarlas, sólo quiero que si es posible para la Presidencia Europea tengamos la casa acondicionada para que la podamos usar todo el año. Este salón no lo tiene ninguna casa, ni su magia arquitectónica. Alicante tiene aquí un núcleo cultural y de relaciones internacionales que si quiere, puede explotar al máximo.

¿Ha limado asperezas con la Diputación gobernada por el PP y Cs que amenazó con retirarse del proyecto?

La Diputación el día 30 de diciembre pagó su cuota y yo no tengo ninguna aspereza. He pedido reunión con el presidente y estamos a la espera de concretar fecha. Y con el Ayuntamiento tenemos la gestión de la licencia de la actividad. Hemos pedido ver al alcalde y no ha podido ser. Se ha aplazado ya tres veces.

El alcalde de Elche sí le recibió esta semana.

Sí. El de Elche quiere ser consorciado y si Elche entra, que aporte 40.000 o 50.000 euros supone para la Casa tres programas internacionales.

"Los diplomáticos estudian para ser diplomáticos y la mayoría se mueren sin ser embajadores. Porque los embajadores, los políticos o los de la escuela, todos son nombrados a dedo"

¿Qué opina de la polémica de su perfil político no diplomático en su designación?

¿En qué libro pone que los directores de las casas debamos ser diplomáticos? No hay artículo en los estatutos que lo diga, como no pone en ninguna ley que un embajador tenga que ser diplomático. Los diplomáticos estudian para ser diplomáticos y la mayoría se mueren sin ser embajadores. Porque los embajadores, los políticos o los de la escuela, todos son nombrados a dedo. Aquí ha habido cuatro directores antes de mi llegada, dos diplomáticos y dos que no lo eran. Las primeras no lo eran. Pero es que yo vengo de haber formado parte de una embajada, del cuerpo diplomático, sin ser diplomático.

Antes Xàbia también era patrono.

Sí, dejó de pagar y se fue porque dijo que no le parecía decente que no tuviese nada, porque se había convertido en una casa de cultura de Alicante. La condición para los que están y para los que quieran entrar es que la casa externalice actividades. Si vamos a hacer un foro económico en Orán, mucho mejor podemos hacer un foro de juventud en Xàbia, Elche o Murcia. Murcia nos ha pedido conversaciones. Y si Málaga quiere participar, hablaremos con ellos.

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