Hartwig Fischer, ya exdirector del Museo Británico.

Hartwig Fischer, ya exdirector del Museo Británico.

Patrimonio

El director del Museo Británico dimite tras el escándalo del robo de piezas por un veterano conservador

En un comunicado, el máximo responsable del centro ha dicho que resulta evidente que el museo "no respondió de forma tan exhaustiva como debería" cuando fue alertado en 2021.

25 agosto, 2023 17:30

El escándalo del robo de piezas históricas por parte de un veterano conservador del Museo Británico se cobra su primera víctima. El director de la institución, Hartwig Fischer, ha anunciado este viernes su dimisión con efecto inmediato. En un comunicado, el máximo responsable del centro ha dicho que resulta evidente que el museo "no respondió de manera tan exhaustiva como debería" cuando fue alertado de los hurtos ya en 2021 y que asume todas las responsabilidades.

En la nota, Hartwig Fischer, un historiador del arte de 61 años cuyo mandato vencía el año que viene, ha explicado que ha estado repasando detalladamente durante los últimos días los acontecimientos en torno a los robos en el Museo Británico y la investigación sobre los mismos. "Es evidente que el Museo Británico no respondió de manera tan exhaustiva como debería a las advertencias de 2021 y al problema que ahora ha surgido", ha reconocido. "La responsabilidad de ese fracaso debe recaer en última instancia en el director (...) Dimitiré tan pronto como la junta haya establecido un acuerdo de liderazgo interino".

El museo anunció la semana pasada que había despedido a un miembro de su plantilla después de que una serie de objetos de la colección, datados entre los siglos XV a.C. y XIX d.C., y algunos hechos de oro, joyas y gemas preciosas, se encontrasen "perdidos, robados o dañados". El sospechoso fue identificado como Peter Higgs, un doctor en arqueología de 56 años que comenzó a trabajar en la institución en 1993, de la que era experto en la Antigua Grecia y especialista en escultura griega y el periodo helenístico. Su familia ha defendido su inocencia en declaraciones a la prensa británica.

[El caso del Museo Británico no es único: los mayores robos de la historia en los museos]

"La situación que enfrenta el museo es de suma gravedad. Sinceramente creo que superará este momento y emergerá más fuerte, pero lamentablemente he llegado a la conclusión de que mi presencia está resultando una distracción", ha reconocido Fischer. Los objetos desaparecidos durante las dos últimas décadas, que podrían ser más de 2.000, no estaban expuestos en las salas, sino que se conservaban en los almacenes para ser estudiados por los investigadores.

Las primeras noticias sobre la desaparición de piezas de la colección del Museo Británico, algunas de las cuales se habrían vendido en el mercado negro ya en 2016, llegaron a través de un marchante de arte llamado Ittai Gradel. Este hombre escribió a la institución británica alertando de que había visto indicios de que objetos pertenecientes al museo estaban a la venta en internet, pero le respondieron que "no había indicios de ningún delito". Fischer también se ha retractado de unas declaraciones en las que acusaba al comerciante de ocultar información sobre la verdadera envergadura del caso.

El consejo de administración del Museo Británico, presidido por George Osborne, ha aceptado la dimisión de Fischer. "Voy a ser claro con esto: vamos a solucionar lo que ha ido mal. El museo tiene una misión que perdura entre las generaciones. Aprenderemos, recuperaremos la confianza y nos mereceremos ser admirados de nuevo", ha señalado Osborne. La semana pasada el exministro de Economía de Reino Unido detalló que junta había tomado "medidas contundentes para abordar la situación, colaborando con el equipo del museo" y utilizado "todos las capacidades disciplinarias a su alcance para lidiar con el individuo a quien creemos responsable".

Este jueve, la Policía Metropolitana de Londres dijo que un hombre había sido interrogado tras la denuncia de los supuestos robos. Los agentes también aseguraron que no se habían realizado arrestos, pero que los investigadores habían interrogado al individuo bajo precaución. "Hemos trabajado estrechamente con el Museo Británico y continuaremos haciéndolo", añadiendo que el hombre había acudido a la comisaría de forma voluntaria.