Saciar el hambre con algunos de los bocados tradicionales y más deliciosos en Cantabria es casi un imprescindible y es que esta región es un auténtico icono gastronómico en el que es posible disfrutar de los cinco sentidos a través simplemente de la comida.

Platos tradicionales como el cocido lebaniego, las rabas, las anchoas de santoña, el sorropotún, sus carnes o los postres pasiegos repletos de sabores, olores y texturas insuperables que son capaces de hacernos viajar a cualquier parte de esta comunidad sin movernos de la mesa.

Sin embargo, también hay cabida para platos más tradicionales y típicos en España como la clásica tortilla de patatas o las tradicionales croquetas. Estas últimas y en una de sus versiones más deliciosas son las que podrás disfrutar en un restaurante cántabro ubicado en Arenas de Iguña.

Las mejores croquetas de queso gorgonzola y nueces están en Arenas de Iguña

Esta vez te proponemos acercarte a un restaurante diferente y en el que cualquiera de las opciones de su carta no tienen desperdicio. En él encontrarás una carta muy extensa en la que no faltan especialidades de la tierra, platos de cuchara y postres caseros pero con un toque y estilo muy diferentes.

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Sin embargo, de todos los platos con los que podrás encontrarte, son pocos los que se resisten a pedir su ración de croquetas. Tanto las de cecina y boletus, como las de pollo al curry no tienen desperdicio, pero las de queso gorgonzola y nueces están entre las más recomendadas. Una auténtica delicia perfecta para cualquier amante de las croquetas y del queso. El precio en la carta de cualquiera de estas opciones es solo de 9,50 euros.

En cuanto al resto de especialidades, no faltan otras delicias como la buta siciliana con panceta japonesa sobre una tosta de sobao, buñuelos de bacalao en tinta de calamar, puerros confitados a la carbonara, gyozas de gambón y verduras, pan bao con pulled pork o el milhojas de lechazo confitado, entre muchas otras.

Fusiones aparentemente imposibles de platos y sabores tradicionales con conceptos de platos mucho más modernos, entre los que también hay cabida para el ramen lebaniego y del cantábrico, lasaña crujiente de mar o los panipurin de pulpo, que son unas bolitas crujientes rellenas de pulpo con mayo de escabeche.

Opciones únicas y muy sabrosas que lo han convertido al restaurante Casa Victoria en uno de los restaurantes mejor valorados de Arenas de Iguña y de Cantabria: " Fue todo un acierto, puedes pedir raciones más pequeñas de algunos platos y eso nos permitió probar diferentes sabores. Todo estaba muy bueno, además de ser platos originales. Mención especial a la Buta siciliana. Impresionante", " Nos decantamos por el menú degustación para poder probar varios entrantes. Las croquetas y los postres increíbles".

"Croquetas espectaculares y sin palabras para la torrija de sobao pasiego", "las croquetas de gorgonzola una delicia, las gyozas de gambón muy ricas y los nachos parecían caseros tal y como nos dijeron y muy ricos", "las croquetas de gorgonzola y nueces cremosísimas"... Son algunas de las muchas buenas valoraciones con las que cuenta este restaurante de Arenas de Iguña.

Qué destaca de la gastronomía cántabra en Arenas de Iguña

En Arenas de Iguña podrás sumergirte en la auténtica cocina cántabra y disfrutar de algunas de las tradiciones culinarias más antiguas de la zona. El pan, elaborado como antaño, es otra de las delicias que no puedes dejar de probar en esta villa cántabra.

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En cuanto a la gastronomía, esta región también es conocida por su excelente carne de caza, proveniente de la Reserva de Caza del Saja. De hecho, uno de los platos más destacados es la carne de venado, macerada en vino tinto y luego asada con verduras, una preparación que resalta los sabores naturales de la carne.

Otro plato típico que no se puede pasar por alto es el cordero asado, preparado de forma tradicional y que le da un sabor auténtico y delicioso.

También hay cabida para una excelente variedad de quesos de oveja, que se destacan por su calidad y sabor distintivo. Además, los productos locales incluyen nueces, castañas, sobaos pasiegos y una exquisita mantequilla. Ingredientes esenciales en la cocina cántabra que complementan perfectamente cualquier comida.

Una experiencia gastronómica única rodeada además por un entorno natural impresionante y de montañas, paisajes pintorescos y mucho encanto rural.