El oficial de Bomberos y jefe de guardia, Joaquín Vilches, es uno de los efectivos que ha estado durante los últimos días colaborando en las labores de extinción de los incendios de León.
Tras haber trabajado durante los últimos tres días sobre el terreno, Vilches ha vuelto a casa, aunque no olvida la experiencia vivida. Detalla que su labor se ha centrado en intentar "proteger a las poblaciones".
El último contingente de bomberos enviado a la zona llegaba este domingo por la noche al parque de Bomberos de Campanar, en Valencia.
Además de estos doce efectivos, desde la capital se han mandado vehículos autobomba, vehículos ligeros y otro tipo de material.
En estos momentos solo queda en León el oficial encargado de dar el relevo a la dirección de la emergencia. Posteriormente regresará a Valencia.
Vilches ha explicado que este contingente de Bomberos ha estado tres días trabajando sobre el terreno: "Ahora han mejorado las condiciones y el puesto de mando ha ordenado la retirada porque ya no hacíamos falta".
Así, durante estas últimas jornadas, las labores de estos bomberos valencianos han sido claras: "Hemos trabajado en diferentes zonas sensibles y protegido a poblaciones, hemos cubierto sectores que marcaba el puesto de mando".
Sobre la experiencia de trabajar ayudando a sofocar un incendio en otra comunidad autónoma, Vilches asegura que "es una gran experiencia profesional": ""Venimos cansados, pero contentos y satisfechos con el trabajo que hemos hecho".
Además, ha destacado la coordinación con el resto de bomberos, que ha sido "absoluta" y se han sentido "muy a gusto".
Los bomberos han sido recibidos en el parque de Bomberos de Campanar por sus compañeros y por la concejal de Hacienda y alcaldesa en funciones, María José Ferrer San Segundo. Ella les ha dado las gracias por su trabajo y ha alabado la actuación de los agentes en la lucha contra el fuego.
Estos días Valencia ha desplazado a Castilla y León varios contingentes, que han ido dándose el relevo. La primera dotación municipal trabajó en la zona de Compludo y defendió la ladera de una montaña, de gran valor ambiental, para impedir que el fuego saltara al otro lado.
La segunda dotación ha trabajado en la protección de zonas especialmente sensibles, entre ellas los accesos a poblaciones y en las tareas encomendadas por la dirección de la emergencia.
El dispositivo municipal se ha englobado en el envío conjunto de los tres consorcios de bomberos de la Comunitat Valenciana y los ayuntamientos de Valencia, Castellón y Alicante y que ha coordinado la Generalitat.
