La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha entregado al juzgado de Instrucción número 13 de Valencia, encargado del caso Azud, un informe en el que desgrana los gastos de una tarjeta de la que era titular José María Corbín.
Según la investigación, se habrían abonado "desde diversos productos bancarios nutridos con fondos de aparente naturaleza ilícita". Es decir, proveniente, presuntamente, de comisiones ilegales por adjudicaciones públicas.
La Guardia Civil cifra gastos en un total de 250.000 euros entre los años 2005 y 2015. Se habrían efectuado en El Corte Inglés con la tarjeta de estos grandes almacenes de la que era titular Corbín y en la que estaba autorizada su mujer, María Asunción Barberá (hermana de Rita Barberá).
Entre los gastos, según la Guardia Civil, figuran prendas de vestir, zapatería, perfumería, productos de supermercado, electrodomésticos o parafarmacia entre otros.
Por parte de la Agencia Tributaria ya se acreditó que entre 2012 y 2015 se realizaron compras por valor de 101.789 euros. Pero la Guardia Civil aumentó el plazo temporal en su análisis y abarca de 2005 a 2015 -periodo en el que se investigan los hechos del caso Azud-.
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"Esa tarjeta ha girado los cargos a diversos productos bancarios titulados, tanto por parte del propio Corbín y su mujer como por la mercantil Corbín Abogados", señala el informe de la UCO. "Todos los productos desde los que se producen diversos adeudos habrían sido destinatarios de fondos que se consideran comisiones de naturaleza ilícita", añade.
Con respecto a los titulados por Corbín y su mujer, dice el informe, "ambos fueron utilizados para la introducción de fondos en efectivo".
Para el análisis de todo ello, el juzgado requirió a El Corte Inglés la documentación y éste aportó información desde el 2009.
1.850 euros el mismo día
Con ella, la UCO ha analizado los productos formalizados por Corbín, Asunción y el despacho de abogados del primero.
La Guardia Civil cree que esos gastos habrían sido llevados a cabo mayoritariamente por la propia Asunción. En su caso, supondrían una cuantía total de casi 144.000 euros.
A modo de ejemplo, la Guardia Civil menciona varios documentos de venta aportados por los grandes almacenes. Entre ellos, 1.850 euros en prendas de vestir abonados el mismo día.