"Señores y señoras que se dedican a la política: sigan, pese a las amenazas, haciendo leyes que reconozcan que las personas somos diversas. Por encima de todo, las personas transexuales tenemos el derecho a ser quienes somos. No permitan que nadie nos arrebate la felicidad". Así ha terminado su discurso Elsa Ramos, una niña extremeña de 8 años que está agitando las conciencias en favor de la visibilidad trans.

Le ha bastado un minuto y medio para dirigirse con tono firme a los políticos de la Asamblea de Extremadura este lunes en Mérida, durante la cuarta edición del Pleno Escolar contra el acoso por LGTBIfobia que organiza la Fundación Triángulo y el Instituto Santiago Apóstol de Almendralejo. El vídeo de su intervención se ha hecho viral a través de Twitter y sus palabras sencillas y certeras están en boca de medio país.

Elsa relata, entre otras cosas, cómo es su día a día en el pueblo donde vive, Arroyo de San Serván (Badajoz). Demostrando que la tolerancia a la diversidad no es exclusiva de las grandes ciudades, la niña asegura que "he tenido suerte de nacer en mi pueblo. Allí todo el mundo sabe que soy una chica diferente, una chica transexual, y me siento querida y respetada".

"Tengo derecho a ser llamada como me siento"

Elsa y su familia forman parte de la Fundación Triángulo Extremadura desde hace cuatro años. De hecho, la madre de la pequeña, Anabel Pastor, se había dirigido al mundo desde la misma tribuna en 2014 en la primera edición del Pleno. Sin embargo, las palabras de su hija han retumbado todavía más fuerte, dejando a la Cámara con un nudo en la garganta:

Elsa, la niña trans que arrancó el aplauso de los políticos extremeños

La presidenta de la Asamblea, Blanca Martín, abogó después de la intervención de Elsa por "seguir rompiendo barreras y luchar contra conceptos de odio. El odio se cura desde la escuela y desde ella se construyen los cimientos para una sociedad más justa e igualitaria".

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