Pobre Celia Villalobos. Es que no hay manera de que la dejen en paz. Siempre tiene que haber una cámara pendiente de sus movimientos en el Congreso y, claro, pasa lo que pasa. Que la pobre diputada estaba tranquilamente ojeando el catálogo online de Zara y ahí, a sus espaldas, estaba el objetivo de laSexta, como si no tuvieran otra cosa mejor que hacer. 

La imagen de la popular, que se ha hecho viral en la tarde de este miércoles, nos recuerda mucho a otra de sus grandes pilladas: aquella memorable partida al Candy Crush que se estaba echando durante en debate de Estado de la Nación en febrero de 2015 cuando ejercía de vicepresidenta del Congreso. 

Lo curioso es que la mujer, momentos antes de ser cazada, se quejaba de que la ministra de Justicia, Dolores Delgado, no había escuchado la intervención de la popular María Jesús Bonilla: "ni la ha mirado, no le ha prestado un segundo de atención". Pero Celia, mujer, que quizás también estaba buscando un modelito o echándose una partidita, que hay que ser comprensivos en esta vida.

Twitter ha vuelto a estallar

Villalobos no ha tardado en convertirse en tendencia en la red social. Y es que es ver su nombre al margen, temerse lo peor y confirmarlo. Qué injustos somos a veces:

"¿Me van a perseguir hasta que me muera?"

Sin embargo, Celia, genio y figura, lejos de amilanarse con la situación, pedir disculpas o mantener silencio, se ha venido arriba y ha reivindicado su derecho a hacer lo que le da la gana con su característica chulería. 

El programa Más Vale Tarde de laSexta se ha puesto en contacto con la diputada, que sostiene que "he hecho lo que me ha dado la gana", añadiendo que ella no es "nadie" y que está "muy tranquilita y muy a gustito", para sentenciar: "¿me van ustedes a perseguir hasta que me muera?".

Con todo, es normal muchos se hayan sentido humillados por la diputada:

Aunque también conviene recordar que, quizás, la popular no es el peor de nuestros males:

¿Qué podemos esperar de la nueva temporada de Villalobos? ¿Con qué nos sorprenderá su iPad? Se abren las apuestas.