El pasado mes de mayo la cuenta de la Guardia Civil revolucionó las hormonas tuiteras con la foto de un agente. Mirada al infinito, barbita de varios días, cuerpo escultural, fondo desenfocado en un magnífico efecto bokeh al que nadie prestó la más mínima atención. No, en serio, fíjate, la foto es, técnicamente, muy buena.

No sabemos si era el efecto esperado por los responsables, pero la imagen revolucionó bastante las redes sociales, logrando que los abanicos fueran trending topic. Claro, era abril. Primavera, que la sangre (y la nariz) altera.

También hay que decir que apareció más de un ofendidito de Internet diciendo que eso era cosificación y tal. 

La cuestión es que unos meses después, Jorge Pérez (porque sí, tiene nombre), ha decidido volver a poner patas arriba las redes sociales, esta vez Instagram. Y lo ha hecho cosificándose otra vez, ahora sin uniforme y bajo la ducha.

Y es que desde que rompió moldes con su anterior foto ha aumentado y mucho su actividad en Instagram, que de hecho estrenó en el mes de abril. Jorge Pérez compagina su actividad como agente de la ley con el de modelo, y evidentemente Instagram es la plataforma ideal para lucir palmito y añadir un comentario filosófico de esos que parecen salidos de una galleta de la suerte comprada en Hacendado:

Esperemos que no aumente la delincuencia por culpa de agentes así.