A todos nos gusta un buen meme, de ahí su enorme éxito. Facebook, Twitter, Whatsapp, Instagram... da igual donde te metas, te encontraras con ellos. Esos chistes en forma pictórica, que toman todo tipo de formas, desde una imagen usada mil veces con un texto nuevo o una foto reciente pasada por Photoshop. Todo empezó como un simple divertimento de algunas personas en Internet ha acabado por convertirse en un gran negocio en las redes. Y si te gustan, seguramente seguirás a Cabronazi.

Sin duda, se ha convertido en el gran referente del meme en nuestro país, y lo ha logrado, paradójicamente, sin crear memes, al menos en su primera fase de crecimiento. La página de Facebook se creo en 2015, tal y como explican sus creadores a El Confidencial "para difundir todo aquello que les llegaba por Whatsapp". Y funcionó como un trueno. La combinación de los memes con lo agresivo-trasgresor del nombre fue gasolina para acumular millones de seguidores en un momento en el que Facebook mimaba a las páginas con una visibilidad sin igual.

Era entrar en Facebook y siempre te encontrabas una publicación suya. No importaba que lo siguieras o no, siempre había alguien que lo había compartido. Hoy cuenta con un total de 12 millones de seguidores -seis de ellos logrados el primer año-. Y eso únicamente en la página original, a eso hay que sumarle sus spinoff (Cabrodeportes, Cabromotor o Cabropeludos, por  ejemplo) y sus cuentas en otras redes sociales, además de su página web Cabroworld. Y ese es el nombre que ha causado su última polémica.

Cabronazi, plagiador reincidente

Ante las protestas -que incluso llevó a Facebook a cerrarles temporalmente la página-, Cabronazi modificó su forma de operar, comenzando a citar a los autores originales. Sin embargo, hay creadores de contenido que aseguran que no es así, como King Kani, uno de los miembros de la comunidad que más ha criticado la forma de actuar de Cabronazi. "Todo todo no creo que sea robado, pero gran parte sí. No han editado nunca una imagen. Desde que saqué lo que hacían han empezado a dar mas crédito para disimularlo" explica a EL ESPAÑOL. "Son listos. Roban contenido a cuentas pequeñas, si sacan algo de, por ejemplo, Santiago Segura, le dan crédito".

"Las cuentas de memes empezamos a hacerlos porque nos gustan y somos personas independientes, aunque hay cuentas compartidas. Ellos lo tienen como un negocio, tienen una sede y tienen incluso gente trabajando. Dicen ser tres pero todo el rato suben material cada diez minutos en cada red. Imposible de explicar".

Un año después de su nacimiento, Cabronazi se constituyó en empresa, creando el portal y llegando a facturar 370.000€ en 2017, según datos de El Confidencial. Pero para entonces ya se habían convertido en un enemigo de buena parte de los creadores de contenido que veían como Cabronazi crecía a costa de su esfuerzo. De hecho, hace tres años la Plataforma de Autores de Contenido Original (PACO, solo una asociación de humoristas podía llamarse así), les dedicó este vídeo:

¿Cómo se gana dinero con un meme?

¿Pero cómo se monetiza un meme? "Lo que hace para monetizar es llevarlo todo a su blog. Sube memes sin dar créditos y publica enlaces al blog con clickbait. Al entrar es todo publicidad. También pone su marca de agua en videos que no son d pe ellos, poniendo Cabroworld, para que la gente le visite", cuenta King Kani.

Es decir, el meme no se monetiza de forma de forma directa. Lo que le permiten los memes es crecer mucho en redes. Gracias a eso, mucha gente entrará en los enlaces a tu blog, algo que sí es posible convertir en dinero gracias a la publicidad que incluye. 

Una polémica nacida en Forocoches

La polémica más reciente tiene un punto de muy irónica, y es que comenzó por una amenaza de demanda por parte de Cabronazi a un pobre usuario que tenía una cuenta en Instagram con el nombre de Cabroworld -cuenta creada el 2 de marzo de 2016, una semana antes que de se solicitase el registro de la marca-. Todo se destapó, como no, en Forocoches, donde trataron de iniciar una campaña contra Cabronazi.

Todo comenzó con un forero que pidió consejo porque una empresa -inicialmente no la mencionó-, le reclamaba cambiar el nombre de su cuenta porque era una marca registrada. Ese hilo de Forocoches, como otros que surgieron a raíz de ello, ha sido eliminado, pero Pepo Jimenez compartió en Twitter algunas de las capturas de la conversación.

A partir de ahí, varios miembros de Forocoches se coordinaron para denunciar a Cabronazi en distintas redes sociales con la intención de tumbarle las cuentas. Sin embargo, los administradores del foro actuaron rápido -esta vez sí- eliminando todos los hilos que aparecían y bloqueando a muchos -muchísimos- de los usuarios que promovían y participaban en la acción.

Pese a la fuerza que ha demostrado tener la comunidad de Forocoches, Cabronazi parece tener más. Logrando resistir fácilmente una carga de caballería que ha noqueado a muchos. Sin embargo, pocas campañas contra los robos de Cabronazi han causado el ruido que ha causado esta polémica. Y todo porque no les gustó que usasen su nombre. Poético.