La historia de Garrett Michael Matthias no tiene un final feliz. Este niño de Iowa (Estados Unidos) ha muerto a los cinco años el pasado 7 de junio víctima de un tipo raro de cáncer, el rabdomiosarcoma negativo alveolar. Después de nueve meses luchando contra la enfermedad, el pequeño se ha despedido de su familia dejando un legado en forma de obituario con todo aquello que le gustaría que recordasen de él.

Cuando sus padres supieron que el estado de Garrett era terminal le propusieron formularle una serie de preguntas para que su legado infantil y feliz fuese el que dijese adiós por él. Dicho y hecho. El niño respondió sin tapujos y, con sus respuestas, elaboraron este texto de despedida, que se ha hecho viral. 

Lo mejor, Batman; lo peor, el "sucio y estúpido cáncer"

"Es él quine habla, esas son sus palabras al pie de la letra", ha dicho su padre, Ryan Matthias, en una entrevista con WHO de la que se ha hecho eco CNN. El hombre ha reconocido que ni él ni su esposa Emilie habían hablado directamente con el pequeño sobre su funeral o su muerte, pero sí de lo que le gustaría que se hiciera cuando ya no estuviese. 

Fue durante esas conversaciones cuando le empezaron a hacer las preguntas mientras ellos anotaban. Desde su color favorito, el azul, hasta su pasión por Iron Man, Hulk, Cyborg o, su superhéroe favorito, Batman. El amor por sus padres, su hermana, sus tíos, abuelos y primos también está recogido.

Le gustaba "jugar con mi hermana, mi conejito azul, el thrash metal, Lego, mis amigos y cuando me duermen antes de que accedan a mi vía". En cambio, Garrett odiaba "los pantalones, el cáncer sucio y estúpido, cuando acceden a mi vía y las agujas".

Hinchables en su funeral

El pequeño decía que los funerales era muy tristes y que, en el suyo, para hacerlo más feliz, tendría que haber castillos hinchables y otros juegos. También dijo que prefería ser incinerado, "como cuando murió la mamá de Thor y convertirme en un árbol para poder vivir en él cuando me convierta en gorila".

Y es que Garrett soñaba con convertirse en simio al morir. Si hubiese podido vivir más le hubiese gustado ser boxeador profesional de mayor. Será este sábado cuando sus padres hagan la "celebración de vida" de Garrett y se despidan de él con fuegos artificiales al atardecer.