Perder el teléfono móvil es uno de los mayores miedos del hombre moderno, mucho más que el cambio climático o una guerra nuclear. Además de valer un buen dinero, en ellos centramos buena parte de nuestras vidas: comunicación, recuerdos, trabajo... y cada vez hacemos más cosas con ellos. Los iPhone, además tienen un valor bastante alto en la venta de segunda mano por lo que si encuentras uno abandonado, puedes sacarle unos eurillos.

Por eso siempre sorprende cuando una persona encuentra un teléfono perdido y lo devuelve, algo que no siempre es fácil. Las medidas de seguridad para que los mangantes no puedan acceder al teléfono también pueden dificultar encontrar a su dueño. Pero eso es exactamente lo que hizo Paul Calderbank.

Paul es un sintecho que vive desde hace cuatro años en las calles de Bolton, una ciudad en el área de Manchester, que  se topó con el el bolso perdido de Daisy Owen en la salida de un bar. En él había dinero y un iPhone 6S Plus. Lejos de quedárselo e intentar venderlo, inició una búsqueda de dos días para devolverlo.

Averiguó la identidad de su sueña gracias a una licencia provisional para conducir, por lo que se dedicó a preguntar a las mujeres que le parecían de la edad de la propietaria. Escribió una carta de tres páginas y la introdujo en el bolso con tal de que nadie confundiese sus intenciones. "Soy una persona honesta y no he robado ni un penique", explica.

Crowdfunding para conseguirle una casa a Paul

Finalmente encontró la casa de la chica, donde encontraron a unos amigos que la avisaron a través de Facebook. Ahora, en forma de agradecimiento ha iniciado una campaña de crowdfunding para conseguirle una casa a Paul.

En apenas siete días, ha logrado recolectar 2500 libras de las 2700 que se marcó como objetivo. "Esta persona me ha devuelto la fe en la humanidad", explica. "Estaba aterrorizado de que otros vagabundos le vieran con el teléfono y el dinero, o que la policía le encontrase y pensase que lo había robado" explica ella en GoFundMe. "Necesitamos más personas como él, tenemos que sacarle de la calle".

"He hablado con él de las distintas opciones y de qué quiere hacer con el dinero", explica a The Independent. "Quiere un piso y quizá un depósito de algún tipo. Me he propuesto conseguirle una casa a este hombre".