"Yo soy Pablo Emilio Escobar Gaviria. Mis ojos están en todos lados". Pocos podían pensar que la conocida frase pronunciada por el 'Patrón del Mal', al que Netflix se ha encargado de convertir en toda una celebridad años después de su muerte, fuese a hacerse realidad en Madrid. El pasado viernes, justo cuando se cumplían 23 años de la muerte del histórico narcotraficante, la plataforma de vídeo 'online' aprovechaba la efeméride para plantar un enorme cartel publicitario en la Puerta del Sol. En él aparece Wagner Moura, el actor que interpreta al capo de la droga en 'Narcos'. A la derecha, un controvertido eslogan, "Oh, blanca Navidad", en clara alusión al consumo de cocaína.

Aprovechando el revuelo causado por el anuncio (algunas asociaciones contra la drogadicción lo han criticado por considerar que "banaliza el consumo de drogas"), José Campoy, un cómico jerezano, ha visto en él la oportunidad ideal para quitarle un poco de hierro al asunto y reivindicar el humor a golpe de "malparios" y "hijueputas". "Yo soy un flipao' de la serie y del personaje de Pablo Escobar. El otro día pasé por Sol, vi el cartel, y se me ocurrió la idea. Y a mí, que me gusta liarla un poco, busqué un hueco y fui a grabarlo", cuenta Campoy al otro lado del teléfono.

Así, ni corto ni perezoso, se calzó una peluca, se pintó un bigote a imagen y semejanza del jefe del Cartel de Medellín y se fue hasta la conocida plaza madrileña a defender su propio anuncio, tal y como lo habría hecho el mismísimo Pablo Escobar. "Está todo el mundo criticando el anuncio de Netflix. ¿¡Si o qué!? Malparidos... ¿Qué pasa? Sí, oh, blanca Navidad. Sí. ¡Qué, qué, qué, qué! ¿Que en Madrid no nieva? ¡Hijueputa! Y el Tío Pepe mirando, diciendo: 'Yo estoy arriba, ¿no?. Ahora yo mando en la Puerta del Sol'", dice este Escobar jerezano en el vídeo mientras suena la sintonía de la serie de fondo.

El cómico, que desde hace nueve años vive -y actúa- habitualmente en Madrid, entiende que el anuncio haya podido causar cierta polémica. Sin embargo, también reconoce que, como campaña de marketing, "debería estudiarse en las facultades de Publicidad". "Lo verdaderamente llamativo es cómo Netflix se atreve a sobrepasar el límite de lo políticamente correcto. Haciendo otro juego con Pablo Escobar, podríamos decir que no sabemos si se han pasado de la raya", bromea. 

El vídeo, que subió a su cuenta de Facebook el pasado lunes, ha sido compartido más de 7.300 veces en apenas 48 horas y roza las 600.000 reproducciones. El humorista, que reconoce ser también un "friki" de los Beatles, apunta que éste ha sido su 'Love me do' particular. La explicación se encuentra, por un lado, en el éxito de la serie y, tal y como reconoce, en la fascinación que sentimos los españoles por los insultos. "En España, dos de cada tres palabras que decimos cada vez que hablamos, son insultos".

En su imitación, desde luego, lo deja claro. Y además, avisa a todo aquel que ose ir en contra de su presencia en la Puerta del Sol: "¿Plata o plomo?".

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