En Osuna, a menos de una hora de Sevilla en coche, se encuentra el Coto Las Canteras, un espacio que comparan con Jordania. "La gente viaja fuera y no saben lo bonito de nuestra tierra", cuenta una de las visitantes del lugar.
Anastasia, una joven que compartió un vídeo en redes sociales mostrando el enclave turístico, despertó la curiosidad de los usuarios al mostrar este rincón de Andalucía: "Este sitio te hará sentir como en Jordania sin salir de España".
Las imágenes provocaron comentarios de sorpresa y orgullo local. "Está en Osuna, un pueblo maravilloso con muchas cosas interesantes para ver, con una gastronomía que hace que vuelvas", explicó un residente de la localidad.
El horario de visitas es de 10:00 a 13:30 horas. El recorrido se completa en menos de una hora, ya que "no es un espacio grande", explica la autora del vídeo.
El precio de las entradas es de cuatro euros por persona, mientras que con guía asciende a seis euros. Los menores de 10 años pueden acceder gratis.
"La Petra de Andalucía"
El espacio, al que denominan "la Petra de Andalucía", ha recibido la visita de celebridades. En 2008, el escritor Mario Vargas Llosa confesó durante su paso por Osuna que se sentía en "el corazón de Petra".
El museo destaca en su web: "Más de 500 piezas originales te esperan. Herramientas de labranza, utensilios de la antigua cantera y tallas donadas por vecinos de Osuna que conectan el pasado con el presente".
Qué se puede ver
El enclave reúne esculturas y murales de "gran valor artístico y simbólico". Entre ellos, el León Íbero, esculpido por Francisco Valdivia en más de 40 toneladas de piedra.
La Vendimia, un mural de más de 100 metros cuadrados dedicado al trabajo agrícola andaluz; Los Tocadores del Cornus, que "custodian la entrada al corazón del Coto con símbolos de misterio y poder".
Además, también se pueden visitar sus más de 4.000 metros cuadrados de jardines con especies autóctonas que completan el entorno.
Desde la época turdetana hasta la actualidad
El Coto Las Canteras explica en su página web la historia de este enclave. En la época turdetana ya se utilizaba este lugar para extraer piedra con herramientas rudimentarias. Roma perfeccionó el proceso y empleó sus sillares en la antigua Urso, actual Osuna.
Durante la Edad Media, islámicos y cristianos aprovecharon sus recursos para iglesias, murallas y fortificaciones.
Con la Edad Moderna y Contemporánea, la extracción se intensificó con el uso de explosivos hasta su cierre en el siglo XX.
A comienzos del XXI, los propietarios Jesús Ramos y Francisco Lobo iniciaron un proyecto de recuperación que transformó la cantera en un espacio artístico y cultural. El escultor Francisco Valdivia aportó nuevas obras que hoy conviven con la memoria del lugar.
