La Semana Santa ya ha comenzado. Las calles de Sevilla rebosan cofrades y las hermandades desfilan por todos los recovecos de la ciudad. Todo está preparado para que la hispalense disfrute de su fiesta grande -con permiso de la Feria de Abril-.
Este evento andaluz se ha convertido en una cita social. Millones de personas visitan la ciudad dispuestos a ver el mayor número de cofradías posibles. Durante una semana se hace casi imposible encontrar un rincón en la ciudad que esté vacío. Al igual que dar con un bar que tenga una mesa libre.
Es decir, la Semana Santa, aunque es uno de los momentos más especiales y esperados por los devotos -sean sevillanos o no- se ha convertido en una de las fiestas que más gente aglutina.
Y es que ver pasar a las procesiones más queridas, como el Tres Caídas, la Estrella o el Gran Poder, para muchos supone una auténtica odisea. Sin embargo, el 'buen sevillano' usa algún que otro truco infalible para vivir la Semana Santa de la mejor manera.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que el número de nazarenos de las cofradías es, en muchas, ocasiones bastante elevado. Prueba de ello es el cortejo de la Esperanza de Triana, que asciende a los 3.000 nazarenos, o la Macarena, que llega a los 5.000.
El truco perfecto
Por esta razón, el tiempo de espera para ver a las devociones llega a superar las dos horas. Es por ello por lo que muchos cofrades optan por ir a buscar los pasos en lugar de aguardar en un punto y esperar a que lleguen.
El hecho de pararse en un sitio y esperar de pie durante horas a que el paso llegue cansa mucho más que ir andando en busca de la cofradía. Además, cabe destacar que en el tiempo en el que se espera y se ve una hermandad desfilar, es posible -si se busca- disfrutar de varias hermandades y descansar un rato.
La mayoría de los cofrades consideran que salir al encuentro de sus devociones es el truco infalible si se pretende vivir la Semana Santa de la mejor manera. No obstante, esta no es la única clave de los hispalenses para disfrutar la fiesta.
Calzado cómodo
Algo muy importante también es hacer una buena elección del calzado. Hay quienes se decantan por usar traje de chaqueta con su correspondiente zapato o quienes se ponen tacones. Sin embargo, esto puede ser una mala opción si se va a estar dando vueltas de un sitio para otro y sin sentarse.
Por esto mismo, la mejor opción es decantarse por un botín cómodo y adecuado para la ocasión o unas manoletinas. Ambos zapatos son completamente planos, suelen tener la suela acolchada y van atados al tobillo, por lo que no chancletearán.
La Semana Santa es sinónimo de pasar muchas horas en la calle y algún que otro rato esperando. Esto hace que recargar energías se convierta en una tarea casi obligatoria.
Prevenidos de casa
Para ello, atendiendo a que la mayoría de bares van a estar llenos, lo mejor es ir a alguna bocatería cercana a hacerse con un bocadillo bastante contundente.
Sin embargo, estos establecimientos también suelen tener largas colas que son sinónimo de espera. Por ello, muchas veces lo mejor es prevenir e ir con un bocata previamente hecho en casa.
Por último, uno de los trucos que mejor funcionan es armarse de paciencia para disfrutar de la Semana Santa. Y es que, por mucho que se intente evitar colas, ir con la comida de casa o buscar los pasos, es inevitable no tener que esperar en algún momento.