Una sevillana de 37 años solicita al Servicio Andaluz de Salud (SAS) una cuantía superior a 400.000 euros debido a un mal juicio clínico: le diagnosticaron estrés cuando, en realidad, padecía un tumor cerebral y que le quedaban "meses de vida".
La paciente tuvo que acudir hasta en ocho ocasiones a las instalaciones médicas públicas de la Junta de Andalucía, y no fue hasta un año después de su primera consulta que le pautaron la prueba diagnóstica necesaria que resultó en la detección del tumor.
En enero de 2023, T.G.L. acudió a su Centro de Salud aquejada de un cuadro sintomatológico que incluía sudoración fría, palidez y una debilidad generalizada que le impedía realizar su vida con normalidad.
La paciente sevillana también advirtió al facultativo sobre que creía padecer una contractura cervical y que tenía temblores en la mano izquierda.
El juicio clínico del médico que la atendió en el SAS fue que sufría estrés relacionado con el trabajo, así como problemas cervicales. Sin embargo, según la información facilitada por Sires Abogados, que lleva la causa de la víctima, "no se le realizó examen alguno".
"La consulta finalizó con una prescripción de antidepresivos y relajantes musculares, no realizando tratamiento alguno en la zona afectada en cuestión", asegura el bufet de abogados.
En dicha consulta, sin embargo, el facultativo sí ordenó una resonancia magnética cervical que le fue realizada a la paciente en mayo de 2023.
Derivación a Neurología
La sevillana acudió hasta en ocho ocasiones más a su Centro de Salud, pero consideraron no pautar pruebas complementarias. No fue hasta la realización de la resonancia magnética que descartaron el diagnóstico de cervicalgia y fue derivada al Servicio de Neruología del Hospital Virgen del Rocío.
En julio de 2023 la paciente acude definitivamente a Neurología, momento en el que presenta la misma sintomatología que refirió en enero a su médico de cabecera. Al considerar el especialista que la exploración neurológica era normal, no se programaron pruebas complementarias.
Según expone Sires Abogados, las patologías que sufría la paciente aumentaron en grado e intensidad, por lo que se vio en la necesidad de acudir nuevamente a Neurología del Virgen del Rocío.
Diagnóstico
Esta visita se produjo en diciembre de 2023, momento en el que le fue indicada una resonancia magnética craneal con fecha de febrero de 2024, es decir, más de un año después de la primera visita a la consulta de su Centro de Salud.
En marzo de 2024, las pruebas realizadas revelaron "un proceso expansivo con morfología en alas de mariposa" que afectaba a la sustancia blanca de ambos hemisferios.
Los facultativos consideraron, entonces, la existencia de una probable lesión glial con distribución de alas de mariposa, es decir, un tumor cerebral.
"En aquel momento le dijeron que le quedaban meses de vida", declara a EL ESPAÑOL de Sevilla José Antonio Sires, abogado de la paciente.
En la actualidad, según sostiene Sires, la sevillana se encuentra en tratamiento de salud mental. "Está perdiendo movilidad en sus extremidades y hay momentos en los que no puede moverse y tiene que desplazarse en silla de ruedas", informa.
Reclamación judicial
En consecuencia, la afectada ha presentado una reclamación judicial contra el SAS por el retraso de las pruebas diagnósticas y del tratamiento de la enfermedad.
Solicita una indemnización inicial de 202.000 euros, aunque debido a los errores médicos detectados durante el proceso, la petición se ha elevado a 417.763,35 euros.
Según Sires Abogados, un reciente informe pericial ha puesto de relieve la mala praxis en ginecología del Virgen del Rocío, que llegó a generar otros 11 días de hospitalización y una cirugía más a la misma paciente.
Esto se ha descubierto después de la aparición de nuevos expedientes médicos que obran en el historial clínico de la paciente y que, hasta ahora, desconocía ella misma.
Desde el SAS han asegurado a este periódico que, pese a que no pueden compartir información de los pacientes, sobre todo "en casos que ya están judicializados", están "a disposición de la Justicia y de los pacientes para explicarles lo que requieran".
