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Más de la mitad de las viviendas registradas en El Castillo de las Guardas están catalogadas como no principal, es decir, son segundas residencias. En concreto, el Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que esta clase de inmuebles alcanzan el 64,91% del total.

La mayoría de estas viviendas no están registradas para el uso turístico, sino que son segundas residencias o moradas vacacionales. Así lo afirma el alcalde del municipio, Gonzalo Domínguez, a EL ESPAÑOL de Sevilla, quien asegura que pese a tener un censo de 1.500, prestan servicios públicos a "entre 4.000 y 5.000 personas".

Domínguez sostiene que El Castillo de las Guardas es "una de las localidades más despobladas de la provincia". Desde la pandemia en 2020 "la población ha ido subiendo y parece que se ha mantenido".

"Fue un pueblo de 4.000 habitantes, pero se paralizaron las minas, el campo dejó de producir, la gente se formó y se fue del pueblo a vivir a la ciudad", relata el primer edil a este periódico.

Desde entonces, tienen "la paradoja" de que los vecinos, pese a que viven en El Castillo de las Guardas, están empadronados en otros municipios, como Sevilla capital. También sucede, tal y como explica el alcalde castillero, que las personas "pernoctan en el municipio de viernes a domingo" para volver entre semana a sus rutinas metropolitanas.

Servicios públicos

Por estas circunstancias, el Ayuntamiento se encuentra con la situación de que recibe un presupuesto para gestionar un censo de 1.500 vecinos pero, por ejemplo, recogen basura de 5.000 personas.

Para ilustrar la situación, Gonzalo Domínguez expone que "en municipios con un censo similar de Sevilla disponen de 44 cubos de basura" mientras que ellos hacen uso de 292 contenedores de residuos.

La misma situación afrontan con el consumo del agua o con el alumbrado público, ámbito en el que afirma disponer de "900 farolas", un número muy elevado para una población tan reducida.

Aspectos como la sanidad y la educación, sin embargo, reconoce serles más favorable. "Tenemos un centro de salud, pero está operativo 24 horas al día con dos médicos, dos ATS, un conductor-celador y un administrativo", expone.

Además, este ambulatorio, pese a atender a "unas 3.000 personas", suele tener citas disponibles. "Yo pido una consulta ahora y me la dan para dentro de 40 minutos", bromea Domínguez, apostillando que se trata de una situación insólita que no se da en otros municipios de Sevilla.

Respecto a la educación, disponen de "una escuela infantil que es del Ayuntamiento" para infantes de entre 0 a 3 años, y un centro educativo en el que se imparten clases hasta 2º de la ESO.

"A partir de 3º de la ESO los niños tienen que desplazarse al centro de Gerena". En este sentido, el primer edil castellero reconoce que este cambio supone un problema para los jóvenes, principalmente a nivel de movilidad.

No obstante, puntualiza que los cursos anteriores, los que se dan hasta 2º de ESO, son "una ventaja para los niños", en la medida que tienen un ratio tan pequeño que, "prácticamente son clases personalizadas".

Empadronamientos

"En el Ayuntamiento necesitamos que la gente se empadrone en El Castillo", insiste Domínguez. Recuerda que "gestionar esto es muy complicado", porque no se trata de administrar un único núcleo urbano, sino un municipio distribuido "en diez pedanías, un casco principal y cuatro aldeas".

Pese a esa complejidad, el alcalde reivindica el valor del territorio. Subraya que El Castillo de las Guardas "está a 45 minutos de Sevilla y muy bien situado", así como a "media hora de las minas de Riotinto y en medio de la nada", lo que explica que "la gente elija el municipio como segunda residencia para pasar periodos vacacionales".

Domínguez también recuerda que "hay un Castillo de las Guardas anterior y verdadero", el pueblo, que a menudo queda eclipsado por la conocida reserva de fauna —con "180.000 visitas anuales"—, pero que "no debe tener el mismo trato que otros municipios de la provincia".

El alcalde destaca que es "uno de los municipios con más viviendas rurales" y que ha crecido notablemente gracias al turismo rural. En este sentido, adelanta que "en las próximas semanas va a salir a licitación un albergue con 38 plazas", una muestra más de la demanda creciente. "Sí, tenemos mucho turismo", confirma.

El atractivo natural del entorno es una de sus principales fortalezas: "la dehesa, el monte mediterráneo y un paisaje de minería". Según subraya, es "el único municipio de Sevilla en el que se pueden ver tres paisajes tan diferentes".