Sevilla
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El Alcázar de Sevilla está siendo testigo este 2025 de una oleada de obras y restauraciones. Con ello, tal y como defienden desde el Ayuntamiento, se pretende recuperar todas sus estancias y que tengan un aspecto muy parecido al original. Varias de ellas, indican, presentaban un "deplorable" estado de mantenimiento tras "años de abandono".

Son numerosos los espacios del monumento, catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, que han sido intervenidos recientemente o están a punto de someterse a una actuación.

Uno de los ejemplos de esta dinámica se podía comprobar ya este lunes con el regreso de las sargas de Gustavo Bacarisas, restauradas entre 2017 y 2023, al Salón de las Bóvedas. En este espacio, donde dichas piezas permanecieron 95 años, se han aplicado mejoras para proteger la conservación de las telas.

Por otro lado, ya se han adjudicado por 216.000 euros las obras para la rehabilitación de la Casa del Inglés, un edificio situado al noroeste de los jardines, que data de 1917 y con "gran valor patrimonial".

Se pretende recuperar y adaptar el inmueble para su actual uso como taller y almacén de herramientas de mantenimiento y jardinería tras años de "nulo mantenimiento", tal como aseguraba Juan Bueno, el concejal encargado del Alcázar.

Son solo dos muestras recientes del trabajo que se ha llevado a cabo en los dos últimos años bajo la gestión de la gerente Ana Jauregui.

El pasado mes de abril, Juan Bueno detallaba en un Pleno que desde julio de 2023 se habían invertido más de 1,2 millones de euros en proyectos de conservación, restauración e investigación arqueológica.

Pasillos monumentales

Entre ellos están los trabajos de conservación y mantenimiento del pasillo que conecta el Patio de las Muñecas con el Jardín del Príncipe en el Palacio de Pedro I. Era uno de esos espacios que había quedado en desuso en los últimos años y que ahora está abierto al público.

La obra en este pasillo, construido entre 1356 y 1366, no solo sirvió para recuperar todos sus elementos decorativos, entre los que se incluían alicatados, yeserías y pavimento, que estaban muy deteriorados.

También ha contribuido, según fuentes municipales, a mejorar la circulación de los visitantes dentro del espacio.

Estanque de Mercurio

Entre las actuaciones estrenadas recientemente también hay alguna planteada por el anterior equipo municipal del PSOE. Es el caso de la restauración integral del Estanque de Mercurio, que fue replanteada con la llegada del Gobierno de José Luis Sanz.

En ella, además de vaciar el estanque y limpiar los lodos, se repararon todas las piezas de una de las zonas más representativas del Alcázar, concebida en el siglo XVI.

Presentación de la restauración del Estanque de Mercurio en enero de 2025. EP Sevilla

Solo falta la restauración de la escultura central del estanque, una joya de 1576. Es un proyecto que ya está en marcha por un presupuesto de 82.700 euros.

De hecho, ahora mismo se expone una réplica exacta. Cuando sea intervenida, se decidirá si se coloca la original sobre el estanque o se expone en una de las salas del Alcázar.

Recuperar los jardines

Además, junto a la restauración integral del estanque de Mercurio, también se puso en marcha un programa para recuperar el esplendor de los jardines. Entre los objetivos estaba compensar la pérdida de ejemplares históricos y plantar árboles que se adapten mejor al clima de Sevilla

También se están ampliando las especies ornamentales, como cipreses, algarrobos y cerezos. Igualmente, se trabaja en la replantación estacional de los parterres.

El Cenador de Carlos V

En el horizonte hay varios proyectos ambiciosos. Uno de ellos es la restauración del Cenador de Carlos V. La primera fase de los trabajos ya ha arrancado y debe estar lista en 2026, a tiempo para el V centenario de la boda del monarca con Isabel de Portugal.

Antes de acometer la recuperación de la que se considera una pieza esencial de la arquitectura hispánica, se realizaron trabajos arqueológicos para determinar el origen del espacio.

Se confirmó que se asentaba sobre lo que era una qubba, el espacio de recreo de los almohades que habitaron allí en el siglo XII.

Fachada del Apeadero y su Sala de Exposiciones

Por otro lado, durante el 2025 se abordará la restauración de la fachada del Apeadero por 300.000 euros, una obra en la que el Ayuntamiento no recibirá el apoyo financiero del Gobierno. El Ejecutivo central rechazó la solicitud de subvención dentro del Programa del 2 por ciento cultural.

La intervención es necesaria, según el proyecto, por las numerosas deficiencias que presenta la estructura y que requieren una intervención urgente.

Además, a inicios de agosto el Ayuntamiento de Sevilla confirmó que también realizaría una intervención integral en la Sala de Exposiciones del Salón Alto del Edificio del Apeadero, tras constatar el "alarmante estado de deterioro en el que se encuentra" la zona.

Estado actual de la sala de exposiciones del Apeadero. E. E. Sevilla

El espacio, según los informes técnicos, tiene "graves daños estructurales provocados por la acción de xilófagos, la humedad, la falta de mantenimiento de las cubiertas y la obsolescencia de las instalaciones". Para rehabilitarlo, será necesaria una inversión de dos millones de euros.

Récord de visitantes

Todas estas actuaciones forman parte, según fuentes municipales, de "una estrategia amplia de conservación", donde se pretende compatibilizar "el respeto por la historia con las necesidades actuales de gestión y mantenimiento".

Mientras tanto, el Real Alcázar no ha renunciado a ser escenario de más de 130 actividades culturales. Como novedad de este 2025, se ha reabierto la cripta del Patio de Banderas y será sede del nuevo Festival de Ópera.

Asimismo, en el 2024 se batió el récord histórico, con 2,3 millones de visitantes que supusieron un ingreso de 16 millones de euros. Según indican desde el Ayuntamiento, es un dinero "reinvertido íntegramente en conservación y mejoras".