Sevilla

De madrugada, desde un descampado de Sevilla capital, se escuchó "'¡Socorro!". El silencio de la noche quiso que la voz le llegara a unos agentes de la Policía Nacional, que corrieron al lugar de donde salían las voces. Allí vieron a un hombre que golpeaba "violentamente" con un objeto en la cabeza a otro, tendido en el suelo. 

La rápida intervención de los agentes impidió el asesinato. Los dos miembros de la Policía Nacional consiguieron apartar al agresor y evitar que siguiera golpeando en la cabeza a la víctima. Pero no fue fácil, señalan desde el cuerpo. 

El agresor, que acabó detenido, llegó sobre las cuatro de la mañana a la comisaría de la Policía Nacional. La víctima, por su parte, fue ingresado en el hospital donde se estudia su estado de salud pero no se teme por su vida, ha podido confirmar EL ESPAÑOL.

Sangre abundante en la cabeza

El detenido, señalan los agentes "hacía caso omiso a las advertencias de los policías" cuando le ordenaron que dejase de golpear a la víctima. Por eso "fue arrastrado a la fuerza para apartarle del agredido".

La víctima, sigue el relato de los agentes, "tenía sangre abundante en la cabeza y la boca" producto de los golpes de su agresor. 

Por el momento no han trascendido más datos porque, señalan desde la Policía Nacional, los agentes siguen investigando los hechos. 

Esta es la segunda vez en pocos días, recuerdan desde el cuerpo de seguridad, "que gracias a la rápida intervención de una patrulla de Policía Nacional, se logra salvar la vida de una persona".