El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha librado nuevas diligencias para escudriñar otras relaciones comerciales entre Jordi Pujol Ferrusola y el vicepresidente de FC Barcelona Carles Vilarrubí, al considerar "irracional" el motivo de los contratratos justificativos de los pagos del empresario al primogénito del expresidente catalán.



Vilarrubí hizo varios pagos por un total de 600.000 euros a las empresas de asesoría -sin personal ni actividad real- que Jordi Pujol y su mujer utilizaban para dar apariencia de legalidad a las comisiones recibidas a cambio de adjudicaciones públicas de las administraciones controladas por Convergència.



Vilarrubí ha alegado que libró estas cantidades a cambio de que le buscaran instalaciones para organizar concursos deportivos ecuestres en Cataluña, lo que al juez y a la Fiscalía les ha parecido "irracional". De hecho, ni el hijo del presidente catalán ni su mujer saben nada de caballos, un mundo por otro lado muy bien conocido por el empresario.



Es evidente que estamos ante una coartada tan falsa como la que en su día alegó Jordi Pujol para intentar justificar el pago de al menos 710.000 euros por parte de FCC, a través de una empresa pantalla radicada en Londres, por supuestamente haber investigado los daños producidos por el huracán Katrina en las infraestructuras viarias de Nueva Orleans. Burdos pretextos para intentar justificar comisiones.