En Alemania, a día de hoy más de 4 millones de hogares disponen de placas solares instaladas en sus tejados. Países Bajos, por su parte, tiene la mayor densidad de placas solares por habitante, con un 34,2% de viviendas generando energía fotovoltaica. En España, con sólo un 5% de autoconsumo residencial, el potencial es enorme y está todavía por explotar.
La creciente aparición en el mercado de soluciones fotovoltaicas para balcones, terrazas y jardines, que no necesitan permisos ni el coste extra que supone contratar a instaladores profesionales, puede ayudar en esa tarea y cuenta con un nuevo contendiente: las cajas 'todo en uno' de Raya Power.
Esta pequeña startup californiana, fundada por dos ingenieras de la Universidad de Stanford, busca democratizar el acceso a la energía solar. Su objetivo es que las placas solares y las baterías sean tan fáciles de instalar y utilizar como cualquier electrodoméstico para cumplir una doble función: ahorrar en la factura energética y servir de fuente de energía de emergencia ante olas de calor, desastres climáticos o apagones.
"La energía solar puede ofrecerte un retorno de la inversión; puede proporcionarte resiliencia, y quiero que eso sea tan normal como tener wifi", sostiene Meghan Wood, cofundadora y directora ejecutiva de Raya Power, en una entrevista para Canary Media.
Su propuesta pasa por olvidarse de los tejados para instalar un kit completo, eficaz y discreto en el patio o jardín de las viviendas, una alternativa portátil y barata capaz de cubrir las necesidades de un hogar promedio sin complicaciones, eliminando de paso la necesidad de permisos y costes adicionales.
Fácil de instalar y usar
"Nuestra misión es empoderar a las personas haciendo que la energía solar sea sencilla y accesible", aseguran Wood y su socia, Nicole González. Desde que se conocieron en una boda durante sus estudios de posgrado en la Universidad de Stanford, se embarcaron en el diseño y la fabricación de un producto capaz de cumplir con esa misión.
González, cuya familia puertorriqueña había sufrido las consecuencias del huracán María en 2017 mientras trabajaba en el proyecto Mars Rover de la NASA, pensaba en la mejor manera posible para devolver la luz y las comunicaciones en caso de un evento extremo capaz de tumbar por completo la red eléctrica.
Meghan Wood y Nicole González en San Juan, Puerto Rico.
Por su parte, Wood se había marcado el objetivo de reducir los costes indirectos de una instalación convencional de placas solares y baterías: la mano de obra, los permisos y la interconexión, que en algunos casos suponen más de un 60% de los costes para el usuario final.
Desde entonces, ambas se han afanado en ir puliendo los detalles y el diseño de una especie de cajas triangulares blancas con paneles solares con capacidad de entre 1,35 y 1,8 kW y baterías con 2,5 y 5 kW/h de almacenamiento.
Lo que buscan desde Raya Power, más allá de las especificaciones, es la facilidad para utilizar esa energía combinada del sol en tiempo real o de la batería 'en diferido' para suministrar electricidad directamente a los electrodomésticos mediante enchufes y conectarla con los sistemas de climatización e iluminación sin necesidad de complejos procesos de instalación.
Esta caja solar "todo en uno", según Wood, incluye todo lo necesario aparte de los propios paneles, inclinados 45º para obtener la mayor radiación posible: batería, inversor híbrido, comunicaciones y electrónica. También incluye en su interior suficiente lastre como para mantener el kit anclado al suelo y hacer frente a tormentas de categoría 3 sin inmutarse.
El resultado es un producto integrado que, según la empresa, puede instalarse en menos de 2 horas, frente a los días o semanas de una instalación convencional. De momento requiere de instaladores especializados, pero Wood y González ya están preparando "una hoja de ruta para convertirlo en un kit hazlo-tú-mismo".
La otra gran ventaja de Raya Power, además de su facilidad de instalación y su versatilidad, es que se puede trasladar si te mudas de casa o incluso venderlo a un tercero cuando ya no lo necesites. Eso supone un nuevo aliciente para personas con bajos ingresos, que pueden recuperar la inversión o no perderla en caso de tener que cambiar de domicilio.
Primeros pasos
El proceso ha sido lento y costoso, pero Raya Power ya dispone de la suficiente inercia como para empezar a poner a prueba su invento. De momento, sus fundadoras han conseguido un millón de dólares de financiación, lo que les permitirá instalar las primeras 20 unidades en viviendas de California y Puerto Rico.
El software desarrollado por las ingenieras de Stanford será el encargado de controlar los flujos de energía de la red, solar y de la batería, para elegir la mejor opción en cada caso. Si el precio de la electricidad es bajo, usará la red eléctrica para suministrar energía a la vivienda, pero si hace sol tirará directamente de lo generado por los paneles solares y, de paso, cargará la batería. Si se produce un corte eléctrico o los precios de la energía son demasiado altos, es el momento de aprovechar lo previamente almacenado.
Una 'caja solar' desarrollada por Raya Power instalada en una vivienda de Puerto Rico.
En estos primeros pasos está siendo fundamental la colaboración de organizaciones benéficas que operan en Puerto Rico como Fondo de Defensa Ambiental, que se está esforzando en ayudar a la isla de Culebra puertorriqueña a conseguir ser totalmente autónoma y sostenible a nivel energético.
Las unidades suministradas por Raya Power "no proporcionan tanta energía de respaldo como los sistemas convencionales, pero su coste es significativamente menor", señala Dan Whittle, responsable del Fondo de Defensa Ambiental en el Caribe. "Y ofrece lo que más desean los habitantes de Culebra: tranquilidad, resiliencia".
Ahora, Wood y González se centran en superar estas pruebas de concepto y reducir el precio de su kit, que se puede reservar por 6.790 dólares (unos 5.800 euros), un coste parecido al de las placas solares y baterías convencionales de similar capacidad. Donde está la diferencia es en el precio de la instalación, que convierte a Raya Power en un proyecto de lo más prometedor.
