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El mantenimiento de infraestructuras básicas en la España rural representa un desafío logístico y económico constante al que no se le presta suficiente atención. Un ejemplo claro son las fosas sépticas, sistemas esenciales en núcleos de población aislados, sin acceso a una red de saneamiento general.

Suelen ubicarse en lugares remotos, sin conexión a la red eléctrica, lo que obliga a realizar limpiezas manuales costosas. De no llevarse a cabo este mantenimiento, se corre el riesgo de que las aguas residuales se acumulen, desborden las fosas y acaben contaminando el medioambiente.

Ese es el reto que planteó la empresa Viaqua, que gestiona el ciclo integral del agua en Galicia, dentro de la primera edición del programa InnovaTech FP, una iniciativa de la Xunta para conectar al alumnado con las necesidades reales de las empresas.

Y a él respondieron (con nota) los alumnos del ciclo superior de FP Eugenia López, Desiré Narciso, David Gallego y Santiago Rodilla, ganadores del premio a la mejor solución gracias a NetClean, un ingenioso sistema que automatiza la limpieza de las fosas sépticas aprovechando la única fuente de energía disponible: el propio caudal de agua residual.

Bajo la supervisión y ayuda de Carlos Lamela Pazos, profesor del Ciclo Superior de Enerxías Renovables en el CIFP Valentín Paz Andrade de Vigo, no sólo han desarrollado un primer prototipo a pequeña escala, sino que han patentado el sistema como modelo de utilidad y ya exploran la posibilidad de su futura comercialización.

El origen del reto

“Desde el propio instituto nos propusieron apuntarnos a esta iniciativa de la Xunta. Había 10 empresas de distintos sectores, cada una proponiendo un reto diferente, y elegimos el que encajaba más con lo que estudiábamos nosotros”, explica a El Español-Omicrono Eugenia López, que estudió el ciclo superior de Diseño y Fabricación Mecánica y ahora trabaja en Coterena, una empresa del sector naval.

“El principal problema de estas fosas es que están completamente aisladas", añade Santiago Rodilla, que actualmente está estudiando ingeniería en Energías Renovables en la Universidad del País Vasco. "El acceso es muy difícil, se necesitan todoterrenos para acceder a caminos de monte, y los operarios tienen que entrar en lugares con la hierba hasta las rodillas, además de correr ciertos riesgos".

El proyecto NetClean de autolimpieza de fosas sépticas

“Hay en torno a 3.000 fosas sépticas de este tipo instaladas en Galicia, en pueblos pequeños de 40 o 50 habitantes, y no están automatizadas”, señala Lamela. "Esto obliga a que un operario deba desplazarse para hacer una limpieza manual y, además, no existe control sobre posibles atascos, que pueden provocar el vertido de aguas sin tratar al medio natural".

Las localizaciones remotas de las fosas sépticas implicaban también la imposibilidad de conectar el sistema a la red eléctrica pública. Descartado el uso de paneles solares por la propia Viaqua debido al riesgo de vandalismo o a que los árboles cercanos les dieran sombra, el equipo tuvo que tirar de ingenio y recurrir a los mismísimos Arquímedes y Pitágoras.

David Gallego, que estudió el ciclo superior de Energías Renovables y ahora trabaja en la empresa de su familia, resume la propuesta técnica: “Aprovechando que las fosas tenían un caudal de agua, buscamos que ese movimiento pudiera generar electricidad a través de un hidrotornillo. Para completarlo, diseñamos un sistema de limpieza que pudiera acoplarse y funcionar en conjunto o por separado”.

Este sistema de limpieza se compone de un rastrillo o cepillo móvil, encargado de recorrer la reja para mover los residuos, un husillo y un cesto recolector de sólidos. Para tener información en tiempo real sobre el estado del sistema y posibles desbordes, unos pequeños sensores se encargan de transmitir los datos a un sistema centralizado de control.

Interior del prototipo desarrollado por los estudiantes de FP Centro Galego da Innovación da F.P. Eduardo Barreiros Omicrono

En cuanto a la división del trabajo, todo estuvo claro desde el principio. “Nos dividimos según lo que estábamos estudiando cada uno", explica Desiré Narciso, que también trabaja actualmente en Coterena tras estudiar Diseño y Fabricación Mecánica. "Santi y David se dedicaron más a la parte eléctrica, sensores y sistema de comunicaciones, y Eugenia y yo más al diseño, el dimensionado del hidrotornillo y el sistema de limpieza. Y Carlos nos estuvo ayudando a cada paso”.

Del prototipo a la patente

El desarrollo del proyecto se extendió durante casi un año, desde la concepción de la idea y el diseño hasta una maqueta impresa en 3D, trabajo que les permitió ganar el reto inicial y recibir un importante impulso.

Sin embargo, no se conformaron con ese éxito, y decidieron seguir adelante para perfeccionar el sistema. “Una vez ganado el reto trabajamos en ello durante cerca de un año más ya que nos dieron un dinero para pulir la idea, lo que ha resultado en una maqueta funcional más elaborada que es casi un prototipo mínimo viable”, afirma Carlos Lamela.

La ambición final del equipo es poder comercializar el invento. “Queremos desarrollar un prototipo viable a escala real, para ver cómo funciona, y para eso nos gustaría contar con el apoyo de Viaqua, ya que el reto partió de ellos”, comenta Desiré.

Tres de los componentes del equipo junto al profesor Carlos Lamela Centro Galego da Innovación da F.P. Eduardo Barreiros Omicrono

A la espera de ese espaldarazo definitivo, el reconocimiento obtenido dentro del programa InnovaTech FP ha sido un gran revulsivo para todos. “Es algo que te incentiva a seguir trabajando en esa dirección. Algo habremos hecho bien para conseguirlo”, reflexiona David.

Por su parte, Eugenia lanza un mensaje a los actuales estudiantes de FP: “Es una experiencia muy motivadora. Nos ha servido para ver cómo, con trabajo en equipo e innovación, una pequeña idea puede llegar a algo como ser inventores de un producto tangible y útil”.

Carlos Lamela, que sigue coordinando a sus alumnos hasta en la entrevista con este medio, destaca la versatilidad del invento más allá de su aplicación inicial. "El conjunto fue la solución para ese problema concreto, pero las dos partes por separado, el sistema de limpieza y el de generación de energía, pueden ser útiles en diferentes instalaciones", concluye.