En los últimos años, la oferta de caravanas y sistemas para camperizar furgonetas se ha disparado en España. La posibilidad de llevar la casa a cuestas es cada vez más atractiva, y en eso también mucho que ver las minicasas, viviendas de pequeñas dimensiones que se pueden instalar en cualquier parte. Hay modelos de todo tipo, desde una barata y ultrarresistente que se instala en menos de 3 días y dura 500 años hasta una que se despliega y triplica su tamaño con sólo pulsar un botón.

Una de las últimas que se han podido ver es la llamada The Long Shed (el cobertizo largo por su traducción al castellano), de la firma escocesa Echo. Esta vivienda fabricada a medida tiene una configuración autosuficiente, por lo que se puede instalar aislada de la red eléctrica y no necesita cimientos. Tiene 28 metros cuadrados de espacio útil y su elemento más distintivo es una gran puerta corredera de cristal de 5 metros que da paso a una terraza.

Con un remolque de 3 ejes que permite transportarla por carretera, The Long Shed cuenta con unas dimensiones de 3,15 metros de ancho y 10,7 metros de largo. En cuanto a los materiales, los protagonistas son la hojalata ondulada con revestimiento de caucho en el exterior, y la madera sin tratar en el interior, además del suelo de tarima de roble. 

La puerta corredera de The Long Shed permite disfrutar del exterior Echo Omicrono

La estancia más amplia es el salón/comedor, que ocupa el centro de la minicasa y dispone de una estufa de leña de 5 kW. En torno a él se sitúan el cuarto de la ducha, un aseo independiente con inodoro de compostaje, la cocina y un dormitorio doble con una mampara corredera que proporciona intimidad sin cerrar el espacio.

El elemento más ingenioso a nivel arquitectónico son precisamente las cuatro grandes cubiertas de madera con estructura de acero que se pueden plegar o desplegar para compartimentar un habitáculo que, de otra manera, sería casi completamente diáfano.

El exterior de The Long Shed Echo Omicrono

De toda la iluminación y la energía necesaria para el frigorífico o las tomas USB, se encargan cuatro paneles solares de 415 W montados en el tejado y dos baterías de 12 V. Por su parte, el agua no potable se almacena en un gran depósito de toba integral con capacidad para 725 litros, que van a parar al calentador de agua, los grifos y la ducha. Los quemadores de la cocina y el horno funcionan con bombonas de gas propano. 

Para conferirle el aspecto de cobertizo agrícola que le da nombre, la minicasa puede cerrarse por completo cuando está deshabitada, lo que además protege cristales y otros elementos de las inclemencias del tiempo. Al ser un modelo a medida, prefabricado con materiales de gran calidad, el precio es acorde a lo que normalmente ofrece Echo, con un coste de salida de 135.000 libras (cerca de 160.000 euros). 

También te puede interesar: