Los próximos modelos de coche Mercedes-AMG disfrutarán de la misma tecnología híbrida de la Formula 1, para mejorar el rendimiento del turbocargador con los gases de escape.
La Formula 1 siempre ha sido el escaparate de nuevas tecnologías, algunas de las cuales han terminado llegando a los coches de calle; aunque en los últimos tiempos, esto no siempre ha jugado a su favor.
Pero los ames o los odies, es innegable que los motores híbridos de la Formula 1 son un increíble logro tecnológico. Con un motor de combustión V6 Turbo de sólo 1,6 litros, se han superado los 1.000 caballos de potencia gracias a los sistemas de generación de energía eléctrica, el MGU-K y el MGU-H.
Un turbo basado en los de Formula 1
El MGU-K es lo que antes se conocía como KERS y permite obtener energía de la frenada; es algo que ya hacen muchos coches eléctricos e híbridos comerciales para ganar algo de batería en nuestros trayectos.
El MGU-H es algo más innovador, al convertir la energía térmica del turbocompresor del motor térmico en energía eléctrica; y es precisamente eso lo que Merceces-Benz ha conseguido implementar en un nuevo turbo para coches de calle, en colaboración con Garrett.
El nuevo turbo desarrollado por Mercedes-Benz
El nuevo turbocompresor se basa en la misma idea que los MGU-H de los Formula 1, pero en vez de aportar más potencia a las ruedas, este sistema se usará para acelerar el turbo y eliminar el temido 'lag'.
Un turbocompresor funciona cuando los gases de escape mueven una turbina, que a su vez activa un compresor que comprime el aire antes de que entre en la cámara de combustión del motor; de esta manera, la proporción de oxígeno es mayor y la explosión resultante es mayor, aumentando la potencia.
El problema es que, a bajas revoluciones, el turbo no funciona porque los gases de escape no van lo suficientemente rápido para mover la turbina; es lo que se conoce como 'turbo lag', porque normalmente la potencia del turbo llega de repente pasadas una cierta cantidad de revoluciones.
Solución al 'turbo lag'
La solución de Mercedes y Garrett elimina el retardo del turbo implementando un diminuto motor eléctrico entre la turbina y el compresor; es capaz de mover el compresor incluso a bajas revoluciones, y se controla con un sistema eléctrico de 48 voltios. Su refrigeración se puede integrar en la del propio motor de combustión.
Cómo funciona el nuevo turbo de Mercedes-Benz
El nuevo turbocompresor puede funcionar a hasta 170.000 rpm, pero más importante aún es que funciona a bajas revoluciones; así que tendremos más potencia y par motor disponibles en todo el periodo de aceleración, no solo al final.
La obligación de usar motores híbridos ha sido duramente criticada por la afición, especialmente por una fragilidad que se ha traducido en más de un pretendiente al título abandonando. Pero al menos parece que puede haber inspirado una buena solución a un problema clásico de los coches Turbo.