Hace escasas horas ha tenido lugar un suceso que ha puesto a más de uno en situación de alarma y no es para menos. La India supuestamente ha puesto a prueba una tecnología con capacidad de destruir satélites que estén en órbitas con armas lanzadas desde la Tierra. Así lo ha anunciado Narendra Modi, primer ministro del país, tercero en la foto de portada.

La prueba ha demostrado que la India ha conseguido dominar la tecnología que se conoce como ASAT o tecnología anti-satélite. Además de las propias preocupaciones que esto genera por motivos obvios, los expertos hablan de las consecuencias de destruir este tipo de satélites, ya que se pueden esparcir y crear cientos de miles de piezas de escombros por el espacio.

La India consigue destruir satélites en órbita

satelite-paz

La misión llamada Misión Shakti ha tenido éxito y se ha llevado a cabo el pasado día 27 de marzo. Los propios indios destruyeron un satélite de su propiedad con un misil lanzado desde la Tierra. El satélite se encontraba en la órbita baja de la Tierra, a unos 300 kilómetros. Si bien Modi no dijo el nombre del satélite, los medios de comunicación y los rastreadores de satélites creen que la sonda que fue destruida fue la Microsat-R, con un peso de 740 kilos y que estaba diseñado para recopilar imágenes militares. Este, efectivamente, fue lanzado por la Organización de Investigación Espacial de la India.

Según informan The Verge y ARS Technica, la India ha presumido de este logro por motivos obvios. Según Modi en un discurso, “La India se ha consolidado hoy como una potencia espacial global. Hasta ahora, solo 3 países en el mundo (EE.UU, Rusia y China) tenían esta capacidad”. Ya en 2012 la misma India reconoció que tenía los “bloques de construcción” para la tecnología ASAT. No ha sido hasta ahora que se ha realizado la intercepción.

Pero, ¿cómo afectó al entorno espacial esto? Por ahora no está claro qué ha ocurrido. El principal sistema de rastreo satelital de la Fuerza Aérea y la Red de Vigilancia Espacial de los Estados Unidos está trabjando en rastrear todas las piezas que se han generado el día de la explosión y en los próximos. La destrucción de estos satélites y más con misiles puede generar escombros por miles que se queden en órbita durante muchos años. Y no es nuevo; ya en 2007 China destruyó un satélite metereológico y generó más de 3000 objetos que a día de hoy siguen en órbita.

El problema de los escombros espaciales

satelite

Lejos de las implicaciones bélicas que esto genera, la principal preocupación con estas pruebas son los escombros generados. Las pruebas de ASAT dejan una corriente de largas distancias repletas de piezas, cubriendo miles de kilómetros a lo largo de nuestra órbita. Estas corrientes se van extendiendo y ampliando más y más, provocando un peligro real para los mismos satélites en sí.

Estos objetos van a una velocidad en la órbita de más de 27 000 kilómetros por hora. Una potencia más que suficiente para que un impacto con otro satélite o lo destruya o lo deje inutilizable. Estas piezas pueden ser de hecho indetectables, haciendo casi imposible realizar gestiones en el ambiente espacial.

A esto se le une el tema de los escombros que caen a la Tierra. Parte de la noticia de este lanzamiento es buena, ya que el Microsat-R que la India ha derribado estaba en una órbita baja, así que la mayoría de piezas caerán a la Tierra dentro de meses o semanas. Sí, las probabilidades de que uno de estos escombros dañe a una persona son increíblemente ínfimas, pero no deja de ser una preocupación.

Este tipo de pruebas son demostraciones de fuerza

foto satelite 1

Que se realicen este tipo de pruebas además genera preocupación a nivel bélico. Hablamos de que unas potencias mundiales tengan acceso a tecnologías capaces de destruir satélites de un plumazo, lo cuál deja a dicha potencia en una posición estratégica superior. Además, estas pruebas son demostraciones de fuerza a nivel político ya que se pueden derribar satélites hostiles y aparte se pueden interceptar (con tecnología similar) misiles balísticos intercontinentales que supongan una amenaza.

La respuesta de la India al respecto ha sido que, según ellos, no han violado ninguna ley internacional al realizar la prueba. El tratado internacional que dictamina cómo deben comportarse las naciones en el terreno espacial es el Tratado del Espacio Ultraterrestre, vigente desde el 1967, pero no prohíbe explicitamente el uso de tecnologías de misiles. También es que estamos hablando de una normativa con más de 50 años de antigüedad.

Es precisamente por esto por lo que la industria espacial comercial ha asegurado que este tipo de pruebas deberían quedar prohibidas inclusive si las consecuencias son mínimas. El motivo es, según dicha industria, que incita a otros países a pensar que estas pruebas son buenas ideas. Según Charity Weeden, presidenta y co-fundadora de la firma de consultoría espacial Lquinox a The Verge, “lo que me preocupa es la normalización. Bueno, los chinos lo hicieron, los rusos lo hicieron y ahora los indios lo hicieron. ¿Quién será el siguiente?”.

Imagen de portada | Mark Neyman / Government Press Office (Israel) en Wikipedia.

Noticias relacionadas