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Hace tiempo que OpenAI, desarrolladora de ChatGPT, dejó de ser una empresa de IA. En España ya es sabido que preparan su propio chip de IA para 2026. Además, se conoce que están trabajando en ciertos controles parentales para ayudar a que su chatbot sea más seguro.

Lo que muchos no esperaban es que sus esfuerzos también acabarían en el cine. Tal y como relata The Wall Street Journal, OpenAI estaría apoyando de forma drástica uno de los primeros proyectos de largometrajes con IA del mundo.

Esta película, llamada Critterz, aspiraría a estrenarse a nivel internacional el próximo año y buscaría ser una demostración técnica sobre las capacidades cada vez más amplias de la IA para generar vídeo a nivel profesional.

Critterz, una película hecha con IA

Hace unos años era totalmente impensable que una inteligencia artificial pudiera generar vídeo. Los primeros intentos, como el famoso clip de Will Smith comiendo espaguetis, fueron rudimentarios e incluso perturbadores.

Mucho ha cambiado en la industria. Google Veo 3 o Sora de OpenAI pueden generar metrajes que, si bien siguen mostrando algunas asperezas a mejorar, son lo suficientemente precisos como para confundir a espectadores inexpertos en materia.

Critterz en su versión remasterizada.

OpenAI lo sabe, y por ello estaría dotando de recursos y herramientas al proyecto concebido por Chad Nelson, especialista creativo de OpenAI. Nelson habría centrado sus esfuerzos en producir esta película usando dichas herramientas de inteligencia artificial.

Critterz sería una película animada, hecha en su mayoría con IA y que trataría sobre las aventuras y desventuras de unas criaturas fantásticas que viven en un bosque. Nelson ya se habría unido a productoras angloparlantes para estrenar esta película en Cannes, en mayo de 2026.

Concretamente, el creativo estaría trabajando con la productora londinense Vertigo Films y con el estudio Native Foreign, una startup proveniente de Estados Unidos centrada en la "narración" impulsada por la inteligencia artificial conjuntada con sistemas de producción tradicionales.

Las claves de Critterz se basan en dos criterios: el monetario y el temporal. Normalmente, una película de animación de primer nivel puede llegar a costar decenas de millones de dólares, con una producción que puede alargarse durante varios años.

Fotograma de Critterz. Critterz | OpenAI Omicrono | YouTube

Nelson y el resto de equipos pretenden completar Critterz en nada menos que nueve meses, con un presupuesto que rondaría los 30 millones de dólares. El 'toque humano' que menciona Native Foreign en su web se traduciría, en este caso, en actores de doblaje y en artistas para crear bocetos aprovechados por las herramientas de OpenAI.

La financiación corre a cargo de Federation Studios, la matriz de Vertigo ubicada en París, bajo un modelo de "compensación" que permitirá que las 30 personas trabajadoras dentro del proyecto puedan repartirse las ganancias del estreno a nivel mundial.

Este proyecto no es otra cosa que una demostración de fuerza técnica, y un intento por parte de OpenAI de probar que la IA ya es capaz de ofrecer el suficiente rendimiento como para ser incorporada en la industria del cine.

Y es que Critterz, al menos tal y como está planteada, destaca por ser un proyecto mucho más barato de lo que debería, completado en un tiempo récord y con una proyección internacional. Las ganancias potenciales en caso de tener éxito podrían ser muy amplias.

Critterz, en su versión original.

Tanto es así, que la propia película ni siquiera se planteó como un largometraje comercial, sino como un corto que se estrenó en 2023 tanto en los canales de OpenAI como de los creadores. Este fue creado en su día con DALL-E 2.

Hace 6 meses, a fecha de escrito este artículo, remasterizaron el corto con Sora. El cambio es sustancial, con unos gráficos muy superiores y con movimientos de cámara mucho más pronunciados, quitándose de encima las posiciones estáticas clásicas de las primeras imágenes de vídeo generadas con IA.

Esta no es ni mucho menos la primera incursión de la inteligencia artificial en la industria del entretenimiento. Firmas como Disney o Netflix ya han coqueteado con esta idea en algunas de las fases de producción y marketing de sus últimas obras.

Invasión Secreta, una de las series más recientes de Marvel Studios, sentó un precedente con una polémica introducción generada completamente usando inteligencia artificial, aunque con resultados mucho más rudimentarios.