Hace unos meses saltó la polémica de la mano de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos: quería crear una fuerza espacial. Parecía una broma, pero no lo fue. Ahora, la Casa Blanca ha lanzado una declaración en la que deja claros algunos detalles de este Ejército Espacial. Ahora podemos confirmarlo completamente: la fuerza espacial de Trump es completamente real.

La Casa Blanca nos habla de cómo será esta fuerza militar espacial

Esta fuerza será la sexta rama de las fuerzas armadas, después de la Armada, la Fuerza Aérea, el Ejército, los Marines y la Guardia Costera. Según la Casa Blanca, la Fuerza Espacial “salvaguardará el dominio estadounidense en el espacio”. Es llamativo que Trump ponga a este ejército al nivel de los más importantes del país.

En la declaración emitida por la Casa Blanca, la creación de una fuerza espacial responde a la promesa de Trump de “restaurar el legado de liderazgo de los Estados Unidos en el espacio […] para proteger a nuestra nación y preservar nuestra libertad para operar en el espacio y desde él “.

La implementación de este ejército está condicionada a 6 recomendaciones provenientes del Consejo Nacional del Espacio. Sorprendentemente, ese Consejo es un Consejo de activación / desactivación creado originalmente en 1989 bajo el mandato de George Bush. Se disolvió en 1993 y luego fue restablecido por el actual presidente en 2017. Estas recomendaciones son las siguientes:

• Formar un Comando Espacial de los Estados Unidos para controlar las fuerzas espaciales y desarrollar las tácticas, técnicas y procedimientos para las operaciones espaciales militares.
• El establecimiento de la Fuerza Espacial como una rama separada y distinta del ejército cuya misión será organizar, entrenar y equipar a las fuerzas espaciales de combate.
• Se le pedirá al Congreso que autorice el establecimiento de una Fuerza Espacial y que proporcione fondos para el Comando Espacial de los Estados Unidos.
• Lanzamiento de una revisión conjunta por el Consejo Nacional del Espacio y el Consejo de Seguridad Nacional de las autoridades operacionales del espacio existente para cumplir con los objetivos de seguridad nacional, informados por la evaluación del DOD de las autoridades requerida.
• Crear una Agencia de Desarrollo Espacial para asegurar que los estadounidenses en la Fuerza Espacial tengan capacidades de combate de vanguardia.
• Creación de mecanismos de colaboración con la Comunidad de Inteligencia para mejorar la unidad de esfuerzos para el desarrollo de capacidades y operaciones espaciales.

El objetivo que detalla Trump es preparar a los militares para los desafíos que enfrentan en el espacio ahora y en el futuro. La Casa Blanca afirma que el espacio ahora es un “dominio de guerra”, aunque no está claro qué significa eso. No ha habido guerras en el espacio, y difícilmente las habrá en nuestros tiempos.

Una decisión que el mundo no verá bien

Existe un acuerdo firmado por Estados Unidos y otros 106 países, el Tratado sobre el Espacio Exterior, en el que se detalla que no se podrán llevar a cabo actividades militares en el espacio. Trump seguramente use un vacío legal para saltárselo, ya que el Tratado no especifica que se puedan llevar armas al espacio, solo prohíbe las de destrucción masiva. O eso, o rompe el tratado como ha hecho con otros que firmaron otros presidentes.

La Casa Blanca asegura tener cierta vulnerabilidad en sus activos en el espacio, y dicen que “el presidente Trump está tomando medidas para garantizar que el ejército estadounidense esté equipado para proteger a nuestra nación y preservar nuestra libertad de operar en, desde y hacia el espacio”.

Sea como fuere, esta decisión debe pasar por el Congreso de los Estados Unidos y debe ser aceptada por la Cámara. Es importante el detalle de otorgar fondos a esta fuerza, por lo que necesitará financiación. Aunque los republicanos tienen cierta mayoría en el Congreso, tendremos que ver cómo se lo toman los políticos norteamericanos. Lo que queda claro es que Trump ha cumplido otra promesa más, por muy absurda e imposible que pueda parecer. Para la desgracia de unos y el beneficio de otros.