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Los afortunados que en España se pudieron hacer con los brutales iPhone 17 Pro estarán más que seguramente encantados con su apartado fotográfico y sobre todo con su potencia. Hay a quien no le basta y necesitan forrarlo de disipadores para reventar benchmarks.

Un usuario de Reddit ha realizado una importante modificación a su iPhone 17 Pro Max específicamente diseñada para conseguir que las pruebas de rendimiento térmico en el teléfono den los mejores resultados: con disipadores.

Usando disipadores de cobre y metal, especialmente los dedicados a SSD, el usuario T-K-Tronix ha conseguido obviamente superar los benchmarks de 3D Mark con nota, logrando por el camino un 90% de estabilidad.

Disipando el calor... con disipadores

Hemos de recordar que los iPhone 17 Pro y Pro Max han hecho importantes cambios a la hora de conseguir el mejor rendimiento térmico posible. Apple dijo adiós al titanio y apostó por un chasis mayoritariamente hecho en aluminio.

El aluminio cuenta con una conductividad térmica muy superior a la del titanio. De esta manera, los iPhone 17 consiguen unas temperaturas generalmente mejores a las de modelos anteriores.

iPhone 17 Pro y iPhone 17 Pro Max Chema Flores Omicrono

También tenemos que tener en cuenta la cámara de vapor incorporada en los iPhone, que ayuda a mantener a raya todavía más el estrés térmico sometido sobre estos teléfonos. Pero todavía se puede llegar a más.

T-K-Tronix se propuso llegar a lo más alto en las pruebas de estrés y rendimiento de 3D Mark y para ello, necesitaba rebajar drásticamente la temperatura. ¿La solución? Colocar encima del iPhone un puñado de disipadores de SSD M.2.

17 Pro Max Cooling with M2 SSD Cooler 90% Stabilty in 3D Mark Stress Test

byu/T-K-Tronix iniphone

Esta clase de disipadores de aluminio usan cobre para disipar el calor, el mismo material dispuesto en el interior de la cámara de vapor dentro de los iPhone 17. Estos disipadores absorben el calor y lo distribuyen por tubos hechos de cobre para disiparlo.

El usuario llegó a añadir nada menos que 5 disipadores en el cuerpo del teléfono, gracias en parte a que este es el modelo 17 Pro Max y por ende es más grande. Un Frankenstein prácticamente inusable, pero eficaz.

Los disipadores, encargados de reducir la acumulación general de calor dispuesta en el chasis de aluminio de los iPhone 17, consiguieron su propósito: el usuario pudo alcanzar un 90% de estabilidad en los tests en 20 ciclos consecutivos.

Obviamente, también logró una muy buena puntuación general gracias a la eliminación del estrangulamiento térmico. Un escenario en absoluto normal, fruto de la adhesión de todos estos métodos de disipación.

iPhone del usuario. T-K-Tronik Reddit

Es evidente que este caso dista mucho de ser uno habitual, ya que nadie podría usar un teléfono con ese mamotreto sobre él. Pero si lo que queremos es exprimir al máximo el rendimiento de estos teléfonos, esta es una gran solución.