El espacio siempre se ha concebido como una meta, un destino, desde la novela de Julio Verne, De la Tierra a la Luna, pasando por el primer viaje al espacio realizado en 1961 por el cosmonauta soviético Yuri Gagarin, hasta la nueva carrera espacial que tiene lugar actualmente. Sin embargo, los avances tecnológicos plantean nuevas posibilidades, como cohetes reutilizables o viajes espaciales turísticos de ida y vuelta.
"¿Qué pasa si la órbita no fuera solo un destino, sino una plataforma?", esta fue la pregunta que se hicieron los fundadores de Inversion Space. Fiaschetti y Austin Briggs, ambos estudiantes de la Universidad de Boston, Fiaschetti realizó prácticas en SpaceX y Relativity Space, donde trabajó en propulsión, hasta que abandonó sus estudios para cofundar la empresa desde su garaje, la clásica historia de Silicon Valley.
Convertir el espacio en una autopista alrededor del planeta Tierra. Esta es la idea de Inversion que ha presentado recientemente su nave Arc con la que aseguran que serán capaces de entregar más de 200 kilogramos de suministros en menos de una hora en cualquier punto del planeta, en principio, para el ejército de Estados Unidos: desde suministros médicos, hasta material militar ante un conflicto urgente.
Autopistas espaciales
El transporte terrestre es cada vez más veloz y se espera que esta capacidad aumente con la llegada de los aviones supersónicos. Sin embargo, el espacio puede ser una vía más rápida, algo que ya se han planteado otras empresas como AliExpress que el año pasado se asoció con una startup china para desarrollar un sistema de reparto espacial y poder mandar las compras online a todo el mundo en una hora.
La empresa Inversion, reveló el pasado 1 de octubre su plan y diseño para un nuevo vehículo de entrega express. Esta presentación llega después de una prueba de concepto que ha demostrado la tecnología que esta startup ha creado en tres años de trabajo, con 25 empleados; la plantilla ha ido creciendo hasta los 60 trabajadores actualmente.
Entregar al ejército estadounidense la capacidad de transportar 225 kilogramos de suministros en cualquier rincón del mundo más rápido de lo que ha sido posible nunca. Cada circunstancia determinará la necesidad de hacer uso de esta nave y su ventaja frente a otros transportes terrestres.
La idea no es preparar un cohete, lanzarlo, que orbite la tierra y después gestionar una reentrada controlada. Este proceso sería demasiado lento, como se puede comprobar siguiendo cualquiera de los lanzamientos de misiones espaciales que se realizan actualmente.
En lugar del proceso tradicional, la nave con los suministros se desplegaría con antelación y permanecería en la órbita terrestre hasta ser requeridos. En ese momento, la nave realiza un regreso controlado para aterrizar de forma autónoma donde sea necesario. De esta manera, asegura la empresa, se consigue cumplir el plazo de entrega de menos de una hora.
Prueba de concepto
Solo ha costado tres años de trabajo realizar la primera misión de prueba en el espacio. Los 25 empleados de esta start-up han creado una pequeña nave llamada "Ray". Se trata de un prototipo para demostrar la viabilidad de su tecnología.
Este modelo, cuyo diseño no se parece al presentado para Arc, se lanzó junto a la misión Transporter-12 a bordo de uno de los cohetes de SpaceX este año. Esta nave espacial de prueba cuenta con una masa aproximada de 90 kg y según afirmó Fiaschetti, la misión se realizó con éxito.
El plan era que Ray volara al espacio utilizando los subsistemas internos de Inversion antes de activar su motor de cohete bipropelente para realizar una combustión de desorbitación y aterrizar frente a la costa de California. Sin embargo, ese no va a ser su final. En esta fase de pruebas, el prototipo no aterrizará, no ha regresado.
Se han limitado a dejarlo en órbita para seguir realizando pruebas con el software a largo plazo, mientras continúan con el trabajo de desarrollo de su nave definitiva. Sin un aterrizaje controlado, el objetivo cumplido era demostrar la capacidad de la empresa de elevar y descender la órbita de su equipo. Además, tenían que mantenerla con potencia positiva hasta la fecha, verificando periódicamente con los controladores de vuelo de Inversion.
Prototipo de nave Ray
Arc llegará más lejos que su predecesor Ray. La nave Arc tiene un tamaño de 1,2 metros de ancho y 2.4 metros de alto. En estas dimensiones deben caber los 225 kilogramos de suministros que se entregarían en menos de una hora.
La compañía aspira a lanzar el primer vehículo Arc para finales de 2026. Según indicaron durante la presentación de la nave el pasado miércoles 1 de octubre, los preparativos van encaminados a cumplir con esa fecha, sin retrasos a la vista.
Suministros militares
En cuanto al regreso a Tierra para la entrega de los suministros. La nave regresará a través de la atmósfera y tiene un alcance de 1.000 km durante el reingreso. Descenderá de forma controlada con un paracaídas para no necesitar pista de aterrizaje.
Simulación de nave Arc aterrizando con paracaídas
Su sistema de propulsión no utiliza materiales tóxicos por lo que, una vez depositada, un soldado puede acercarse inmediatamente después sin necesitar protección. Así pretende esta empresa entregar cualquier carga que el ejército considere oportuna.
Inversion valora una amplia gama de posibles encargos que puedan ser útiles en una misión militar: desde suministros médicos, hasta drones. Elegir el material potencialmente urgente antes de que termine un conflicto para lanzarlo a tiempo a la órbita para tenerlo disponible cuando surja la urgencia al otro lado del mundo.
