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Misiones como Artemis de la NASA o el lanzamiento de satélites como el Queqiao-2 a la órbita lunar vuelven a crear hype en torno al regreso del hombre a la Luna. Es especial el caso de una China que desea plantar cara a los programas de la agencia estadounidense. Ahora han avanzado con su rover Lanyue y sus pruebas.

Hablamos del módulo de aterrizaje lunar Lanyue, el dispositivo de descenso a la superficie que aspira a pasar 15 días en la Luna a base de energía solar. Este se situará sobre la Luna dando vueltas al satélite, donde aterrizará con un vehículo de descenso.

Según relatan las agencias de noticias locales chinas, el país ha completado una prueba integral que involucra el aterrizaje y el despegue del Lanyue en un entorno de pruebas completado, un paso clave para el desarrollo de los programas de exploración lunar de China que rivalizan directamente contra los de la NASA.

El módulo lunar consigue aterrizar

La Agencia de Vuelos Espaciales Tripulados de China (CMSA) ha lanzado un comunicado en el que aseguran que la prueba se llevó a cabo con el éxito esperado, implicando "múltiples condiciones operativas" así como "un largo período de prueba y una alta complejidad técnica".

En este sentido, tal y como adelantan CMS y la agencia Reuters, se pusieron a prueba los sistemas de ascenso y descenso del propio Lanyue. La zona de pruebas elegida se situaba en Hebei, en un entorno específicamente pensado para simular las condiciones a las que se someterá el módulo.

Lanyue en el entorno de pruebas designado por China. Xinhua Omicrono

Tanto es así, que la superficie de prueba incluía un revestimiento especial que tenía como objetivo imitar la capacidad reflectiva del suelo lunar respecto a la luz solar. La CMS también destacó los múltiples "desafíos técnicos" a los que se enfrentó el rover en esta prueba.

El Lanyue integra un módulo de propulsión y un módulo de aterrizaje, y se usará principalmente para llevar taikonautas a la superficie de la Luna, así como servir a misiones ya tripuladas que tengan ese mismo fin.

China detalló en su día su plan para conquistar la Luna en el año 2030. En la cápsula principal Mengzhou viajarán tres tripulantes, mientras que el módulo Lanyue pisará primero suelo lunar. Esperará a que un segundo cohete impulse el Mengzhou con sus tres taikonautas desde la Tierra hasta la órbita lunar.

Allí amarrará con el vehículo de descenso, una maniobra directamente inspirada de las misiones Apollo. Los taikonautas pasarán a través de una escotilla interna, con las dos naves separándose para hacer la maniobra de alunizaje.

El módulo lunar en la prueba de Huailai. Xinhua Omicrono

El Lanyue solo dispone de un juego de motores conformados por cuatro unidades, con un empuje de 3 toneladas para levantar una carga de 15.000 kilos. Además de los taikonautas, el Lanyue portará un explorador y cargas útiles de carácter científico.

Además, una vez se realice el alunizaje, el Lanyue hará las veces de centro de energía y datos. No solo eso; se podrá usar como soporte vital en caso de ser necesario. Básicamente, será la plataforma central para las actividades de los taikonautas situados en la Luna.

Desde la CMSA relatan que las pruebas tuvieron éxito y que el logro en sí representaba un "gran avance en la investigación y el desarrollo" en torno a las condiciones en las que se ejecuta el programa de exploración lunar tripulada de China.

Si todo sale bien, China podrá enviar a sus astronautas directamente a la Luna antes de 2030, con labores que ellos engloban en el campo de la exploración científica.