Los cuatro tripulantes de la misión Fram2 ya han sobrevolado los polos y sentido los primeros efectos de este histórico viaje. Después del despegue, acostumbrarse a las nuevas condiciones con microgravedad no ha sido fácil para estos cuatro turistas espaciales enviados a la órbita polar por SpaceX, empresa fundada por Elon Musk. Aun así, este equipo ha podido comenzar con sus experimentos médicos, algunos de ellos sin precedentes en anteriores misiones espaciales.
"El viaje a la órbita fue mucho más suave de lo que esperaba" ha asegurado Chun Wang, comandante de la misión, en una publicación en la red social X donde detalla las primeras 24 horas con sus compañeros en la cápsula Dragon. El turista espacial asegura que no sintió el cambio a la gravedad cero tras el lanzamiento. Solo Tyler, el peluche oso polar, les avisó del cambio al flotar por la cabina. Al sobrepasar la línea de Kármàn se les considera también astronautas.
Sin embargo, esas primeras horas en microgravedad sí fueron un desafío para el cuerpo de los cuatro tripulantes. "El mareo espacial nos afectó a todos", explica Chun. Describe náuseas y malestar estomacal con simplemente beber un poco de agua, aunque la lectura no agravaba el mareo como suele ocurrir en los tradicionales transportes terrestres, el coche o el barco.
Este malestar general impidió que abrieran la cúpula durante el primer día, aunque en la segunda jornada que ya han iniciado sí se ha abierto durante tres minutos después de la medianoche en el horario UTC, la hora de las Islas Canarias, justo cuando pasaban por encima del Polo Sur. Gracias a eso, han podido compartir un impresionante vídeo de la capa helada del Polo Sur.
El descanso nocturno ha permitido a los tripulantes deshacerse del mareo, aunque antes habían podido llevar a cabo algunas tareas, por ejemplo, contactar con radioaficionados en Berlín.
Las primeras radiografías
Durante el segundo día, tras el desayuno, Chun asegura que ya han comenzado con los experimentos médicos, las primeras radiografías. Durante los 3 a 5 días que durará este viaje, y a pesar de ser un vuelo privado, se realizarán un total de 22 experimentos. Principalmente centrados en la investigación médica, por ejemplo, se han realizado las primeras radiografías de humanos en el espacio. Se persigue dar a los astronautas para realizar tareas funcionales sin asistencia o se estudiará cómo ciertos ejercicios ayudan a mejorar el flujo sanguíneo para que los astronautas sean capaces de mantener mejor salud muscular y ósea.
Otro de los puntos claves de la misión será monitorizar el sueño de los astronautas empleando el anillo inteligente de Oura y así investigar las alteraciones en la calidad del descanso y los niveles de estrés a lo largo del viaje espacial. El comportamiento de la diabetes en el espacio también tendrá su investigación científica particular.
La tripulación también realizará otros estudios como el comportamiento de las hormonas reproductivas femeninas en microgravedad y sometidas a radiación espacial, cómo afecta el vuelo en la anemia o el estudio de la afectación de este tipo de trayectos a la salud ósea.